El 10 de noviembre de 2024, un Boeing 727-227,de Aerosucre con matrícula HK5216 sufrió un incidente grave al despegar del Aeropuerto Internacional El Dorado en Bogotá, Colombia. Según el informe preliminar de la Dirección Técnica de Investigación de Accidentes Aéreos (DIACC), la aeronave impactó una antena del sistema de aterrizaje por instrumentos (ILS), causando daños estructurales, aunque los cinco ocupantes resultaron ilesos.
La aeronave transportaba 19.323 kilogramos de carga hacia Valencia, Venezuela, y realizó un despegue rodante desde la pista 14L bajo condiciones de viento de cola de 9 nudos. Utilizó toda la longitud de la pista antes de rotar y posteriormente impactó una antena ubicada 300 metros más allá del umbral de la pista 32R. Tras el impacto, la tripulación decidió regresar al aeropuerto, aterrizando de manera segura en la pista 14R.
Las inspecciones posteriores al aterrizaje revelaron daños en el tren de aterrizaje, el borde de ataque del slat izquierdo, el flap interior y otras estructuras del ala izquierda. También se confirmó el estallido de una rueda del tren principal.
El informe indica que el uso del procedimiento «Improved Climb Takeoff» bajo condiciones de viento de cola y con un peso elevado pudo haber influido en el incidente. Este procedimiento, diseñado para mejorar el gradiente de ascenso inicial, incrementa la distancia requerida para el despegue, un factor crítico en aeropuertos a gran altitud como El Dorado.
El Improved Climb Takeoff es una técnica utilizada cuando la limitación más restrictiva está en el segundo segmento del ascenso. Permite un ascenso más pronunciado, siendo útil en aeropuertos con obstáculos, altitud elevada o restricciones de ruido.
Recomendaciones de seguridad
- Prohibir despegues con viento de cola utilizando procedimientos como el «Improved Climb Takeoff».
- Mejorar el entrenamiento de pilotos y despachadores en el análisis de rendimiento operacional.
- Realizar inspecciones más rigurosas y frecuentes a los operadores de aeronaves como el Boeing 727.
La DIACC está colaborando con organismos internacionales como la NTSB de Estados Unidos y el CENIPA de Brasil para analizar los datos de los registradores de vuelo y determinar las causas definitivas del incidente. Las conclusiones finales se incluirán en el informe final de la investigación.
