Irkut trasladó uno de los prototipos del MC-21-300 desde el aeropuerto de Moscú-Zhukovsky a Yakutsk con el fin de realizar pruebas de baja temperatura. Esta ciudad, situada en el extremo oriental de Siberia a unos pocos cientos de kilómetros del círculo polar ártico, es la más fría del mundo, con temperaturas promedio en invierno de alrededor de 36 grados centígrados bajo cero.
La aeronave fue acompañada por Andrey Boginsky, CEO de Irkut, quien arribó al lugar escoltado por un equipo de especialistas de Irkut y de Yakovlev. El directivo indicó al arribar al aeropuerto que «el vuelo de hoy es bastante especial por una combinación de factores, incluida la lejanía de la ciudad de Yakutsk y la posibilidad de confirmar el rendimiento de los sistemas de la aeronave gracias a este largo vuelo».
Continuó Boginsky: «el número de especialistas transportados supera los 70, que realizarán pruebas para mejorar la capacidad de la aeronave de funcionar a temperaturas exteriores inferiores a los 30 grados bajo cero. Este es un nuevo paso en la continuación del arduo trabajo que terminó el año pasado con la obtención del certificado de tipo».
El funcionario se refirió finalmente a las primeras entregas de la unidad, indicando que «tendremos que realizar una serie de pruebas para ampliar el certificado de tipo y poder comenzar, a finales de este año, con las entregas de los primeros aparatos a Rossiya».
Daniil Brenerman, director general de la oficina de diseño de Yakovlev -encargada del desarrollo de la aeronave-, dijo que el vuelo de Zhukovsky a Yakutsk se desarrolló sin novedades. Sobre el programa de ensayos de baja temperatura indicó que «las pruebas en tierra y en vuelo durarán aproximadamente tres semanas. El avión se dejará estacionado al aire libre durante 12 horas por la tarde y la noche, y durante la mañana se realizarán los test».
Las pruebas sobre el MC-21-300 se llevarán a cabo en el marco de la futura enmienda a su certificado de tipo. La aeronave se encuentra actualmente habilitada para operar en aeropuertos con temperaturas de hasta 30 grados centígrados bajo cero. Hasta el momento los ensayos venían siendo realizados en sistemas aislados de la aeronave, que demostraron la capacidad de operar en temperaturas de hasta 55 grados centígrados bajo cero.