Luego de más de medio siglo de buen y leal servicio, el avión de transporte táctico C-160 Transall de la Fuerza Aérea y del Espacio Francesa pasará por 24 ciudades francesas, en su tour de despedida.
Pintado con un livery especial para tan importante ocasión, el C160 Transall inicia la primera etapa de su tour de despedida prevista para visitar 24 ciudades durante 20 días.
Durante el primer día, el legendario avión despegó desde la base de Evreux, hogar del 64th Ala de Transporte que operaba este modelo, para llegar a la base aérea Lann-Bihoué a través del Mont Saint-Michel, sitio histórico donde los comandos de unidades especiales suelen realizar entrenamientos de lanzamiento en paracaídas.
Al completar su tour, el avión francés será el último Transall de carga en retirarse de servicio activo, ya que otros usuarios del modelo ya los habían dado de baja. Alemania, por ejemplo, retiró del servicio su último C-160 en diciembre del 2021, para lo cual también organizó un tour de despedida con un avión que lucía un pintoresco livery.
C-160 Transall, un poco de historia
El Transall (abreviatura de Transporter Allianz) tuvo su origen en los años 50, cuando resultaba imperante reemplazar los viejos aviones de carga propulsados por motores a pistón, cuyas carencias habían sido puestas en evidencia durante la Guerra de Corea, por aeronaves de nueva generación propulsadas por modernas turbinas, en este caso, las Rolls Royce Tyne.
El requisito particular que dio nacimiento al Transall, fue la necesidad de sustituir los transportes Nord Noratlas, con motor de pistón, operados por las fuerzas aéreas de Francia (Armée de l’Air) y Alemania (Luftwaffe).
Para alentar la cooperación industrial franco/alemán, se creó el consorcio, «Transporter-Allianz» o Transall, que se formó en enero de 1959 entre la empresa francesa Nord Aviation y las empresas alemanas Weser Flugzeugbau y Hamburger Flugzeugbau (HFB), para diseñar y construir el nuevo transporte.
Se requirió que el nuevo avión transportara una carga de 16,000 kilogramos (35,000 lb) a una distancia de 1,720 kilómetros (930 nmi; 1,070 mi) o una carga de 8,000 kg (18,000 lb) a 4,540 km (2,450 nmi; 2,820 mi ) y que pudiera operar desde pistas de aterrizaje semipreparadas.
El primer contrato, retrasado por los intentos de Lockheed de vender el C-130 Hércules a Alemania, llegó el 24 de septiembre de 1964. Fue por 160 unidades, de las que 110 eran para Alemania y 50 para Francia. El trabajo de construcción se dividió entre ambas industrias aeronáuticas, según el porcentaje de pedidos realizados por cada Nación.
Los primeros aviones de producción comenzaron a entregarse a partir de 1967. A estos primeros lotes, hay que sumarles los nueve C-160Z para la Fuerza Aérea Sudafricana, primer cliente de exportación.
Luego Francia cursó un segundo pedido por 29 unidades de una variante mejorada (llamada NG) con mayor combustible interno, mejoras estructurales y aviónica actualizada. De esta versión mejorada Indonesia adquirió 6 unidades.
En 1971 se suma Turquía como nuevo usuario del C-160, al adquirir 20 unidades de segunda mano de la Luftwaffe.
No todos los Transall desaparecieron aún
Si bien como aeronave de transporte ya no se desempeña en ninguna fuerza aérea, siendo sustituidos por C-130 Hercules y CN-235 o C-295, aún quedan algunos ejemplares de misión especial que continuarán volando durante algún tiempo más.
La Fuerza Aérea y del Espacio francesa cuenta con 2 C-160G Gabriel, variante modificada del Transall para misiones de inteligencia electrónica de señales (SIGINT). Se había programado su retirada de servicio para que coincidiera con la de su hermano de carga, ya que sus reemplazos están de camino.
Sin embargo, tras la invasión rusa, es probable que los Gabriel continúen volando hasta el 2025, cuando debería arribar el primer Dassault Falcon 8X SIGINT de reemplazo.
Turquía también modificó uno de sus C-160 para misiones de inteligencia electrónica, el cual será sustituido en breve por un par de Challenger 605, debidamente modificados para realizar las mismas misiones.
El primero de los aviones ya había arribado a Turquía durante el 2020, para ser modificado en las instalaciones de ANSELSAN a su nueva función. Si estos trabajos no están concluidos aún, es muy posible que Transall de inteligencia de la Fuerza Aérea Turca esté volando bastante sobre el Mar Negro en estos días.