El segundo caza de quinta generación de China fue presentado al público ayer, 5 de noviembre, durante el Salón Aeronáutico de Zhuhai. Con la designación J-35A, este avión es la última evolución del proyecto FC-31 de la empresa china Shenyang, conocida por fabricar durante décadas los cazas rusos MiG y Sukhoi, desde la era de la Guerra de Corea hasta tiempos recientes con la serie Flanker.
China 🇨🇳 unveils the J-35A, country’s second fifth generation fighter platform, at Zhuhai 2024.
The design is derived from the naval J-35 flying for a couple of years now. But here’s a look at how the PLAAF land-based variant has evolved from the very first prototype of 2012. pic.twitter.com/s1KtOsYVXA
— Rishav Gupta (ऋषव गुप्ता) | 🇮🇳 (@connect_rishav) November 5, 2024
El J-35A es la variante desarrollada específicamente para la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (PLAAF) y para exportación, derivada del proyecto J-35, inicialmente concebido como un caza embarcado para atender las necesidades de la Armada del Ejército Popular de Liberación (PLAN). El primer prototipo del J-35A realizó su vuelo inaugural en Shenyang el 26 de septiembre de 2023. Países como Egipto y Pakistán han mostrado interés en la posible adquisición del J-35A/FC-31 para fortalecer sus Fuerzas Aéreas con cazas de quinta generación.
La primera versión del caza J-35A presentaba alguna semejanza con el Lockheed Martin F-22 Raptor, mientras que la variante más reciente, mostrada esta semana en anticipación durante el Zhuhai Airshow, se asemeja bastante más al F-35 Lightning II. Estas similitudes han generado comentarios sobre un posible plagio, alimentados por el rediseño de elementos como el canopy, las entradas de aire y la nariz, que han hecho al J-35A más alto y visualmente cercano al F-35, el cual también cuenta con versiones navalizadas y terrestres.
El parecido con el F-35 no parece ser una coincidencia. Más de una década atrás, se reportaron en Estados Unidos maniobras de ciberespionaje dirigidas por China, que resultaron en el robo de varios terabytes de información clasificada sobre sistemas de armas, incluyendo planos y datos del F-22 y F-35. Estos datos habrían influido en la evolución del diseño del J-31, precursor del J-35, facilitando a China el desarrollo de sus cazas de quinta generación.
Maybe the best comparison to the J-35A pic.twitter.com/RVS2okIunk
— @Rupprecht_A (@RupprechtDeino) November 5, 2024
Aun así, no puede afirmarse que el J-35 sea una simple copia del F-35, ya que existen diferencias visibles en su diseño general que requirieron soluciones específicas. Por ejemplo, el J-35 es un caza bimotor con una bahía de armas central, mientras que el F-35 es monomotor y cuenta con bahías de armamento laterales, lo que implica una configuración interna totalmente distinta entre ambas aeronaves. Sin embargo, la información obtenida habría permitido a los ingenieros chinos optimizar el diseño final del J-35, adoptando ciertas soluciones análogas a las del caza estadounidense.
Además del J-35, China ha desarrollado y puesto en operación el Chengdu J-20 «Fagin», el primer caza de quinta generación fuera de Estados Unidos en entrar en servicio activo. Su desarrollo ha sido más rápido que el del Sukhoi Su-57 ruso y, hasta hace poco, parecía ser el único avión de combate stealth tripulado que interesaba a la Fuerza Aérea China (PLAAF). Sin embargo, el estado de avance del J-35A, presentado en el Zhuhai Airshow, sugiere que la PLAAF podría estar ahora respaldando activamente este nuevo desarrollo.