Estonia cierra la aerolínea estatal Nordica ante falta de interesados en su privatización

Nordic Aviation Group, la aerolínea estatal de Estonia, anunció el cese de sus operaciones y la presentación de una declaración de quiebra para sus empresas Nordic Aviation Group AS y Regional Jet OÜ (Xfly). La decisión se tomó luego de que el potencial inversionista Lars Thuesen comunicara su intención de no continuar con el proceso de privatización debido a los riesgos asociados.

Según Kadri Land, presidenta del Consejo de Supervisión, «el inversionista potencial nos informó que los riesgos eran demasiado altos». Esto llevó al Consejo de Administración a proponer el cese de actividades y el inicio de los trámites de quiebra, medida que fue informada al Consejo de Supervisión.

El proceso de privatización, impulsado por el Gobierno de Estonia desde finales del año pasado, buscaba garantizar la continuidad de la aerolínea mediante la incorporación de capital privado. Sin embargo, las negociaciones finales no lograron concretar un acuerdo.

En agosto de 2023, la empresa inició un proceso de reestructuración con el objetivo de alcanzar la rentabilidad. Para ello, contrató a la consultora internacional Knighthood Global, encargada de revisar las operaciones y la estructura de costos de la compañía. Según el comunicado de la empresa, esta medida buscaba «asegurar la sostenibilidad de la compañía» en un contexto de «situación económica deteriorada» y «costos que superan significativamente los ingresos».

En octubre de 2024, Nordic Aviation Group anunció que un inversionista había presentado una oferta formal para privatizar la compañía, lo que representaba «un hito significativo en nuestra transformación en curso». Posteriormente, se confirmó que el potencial inversionista era Lars Thuesen, propietario de Jettime y con experiencia en el sector aeronáutico. En ese momento, Thuesen había expresado confianza en los esfuerzos de la empresa por «fortalecer y asegurar el futuro de Nordic Aviation Group».

Sin embargo, la decisión de Thuesen de no proceder con la privatización llevó al Consejo de Administración a cesar las operaciones y presentar la declaración de quiebra. Según el CEO, Remco Althuis, la empresa informará a todas las partes implicadas, incluidos empleados, socios y arrendadores, sobre los procedimientos de quiebra y prevé devolver las aeronaves arrendadas «lo antes posible».

El comunicado detalla que, como parte del proceso de quiebra, se notificará al Fondo de Desempleo de Estonia y se cumplirán las formalidades legales correspondientes.

Una historia corta y fallida

Nordic Aviation Group fue establecido el 25 de septiembre de 2015 por el gobierno de Estonia en respuesta a la quiebra de Estonian Air, que dejó al país sin una aerolínea de bandera. Su objetivo principal era garantizar la conectividad aérea de Estonia con el resto de Europa. La aerolínea comenzó operaciones el 8 de noviembre de 2015, con un vuelo inaugural entre Tallin y Ámsterdam. Inicialmente, Nordica operó bajo un modelo híbrido, utilizando acuerdos de código compartido y contratando operadores externos, como Adria Airways, para gestionar parte de sus vuelos.

Ver también: airBaltic comienza a operar tres nuevos destinos desde Tallin, en Estonia

Con el paso del tiempo, Nordica asumió un rol más activo en sus operaciones, lanzando una flota propia y expandiendo su red de destinos. En 2016, se creó Regional Jet (posteriormente conocida como Xfly) como una subsidiaria para ofrecer servicios ACMI (alquiler de aviones, tripulación, mantenimiento y seguros) a otras aerolíneas. Esta estrategia diversificada permitió a Nordica operar tanto vuelos regulares como servicios contratados, lo que la posicionó como un actor relevante en el mercado de aviación regional en Europa.

Sin embargo, la aerolínea enfrentó múltiples desafíos, incluyendo la creciente competencia de las aerolíneas de bajo costo y la fluctuación de la demanda. En 2019, Nordica redujo significativamente su red de rutas y cesó la venta de boletos bajo su propia marca, enfocándose exclusivamente en operaciones ACMI a través de Xfly. Este cambio marcó el inicio de un período de transformación que culminó en 2023 con la búsqueda de un inversionista privado para asegurar su sostenibilidad a largo plazo, un esfuerzo que finalmente no logró evitar el cierre de la compañía.

Su flota estaba conformada por seis ATR 72-600 y cinco CRJ900.

Deja un comentario