El diputado Daniel Robledo (Pueblo Nuevo) trazó ayer en la Comisión de Zona Franca de la Legislatura, un panorama complicado para el aeropuerto internacional de cargas de General Pico.
Ayer fue la primera vez en el año que se constituyó la comisión, y Robledo expresó gran preocupación por el complicado momento por el que estaría atravesando el aeropuerto de General Pico, y advirtió la posibilidad que «incluso pudiera perder la categoría de mediana complejidad para pasar a ser de baja complejidad».
Dijo el legislador piquense que un informe de Carlos Roldán, jefe de administración del aeropuerto, está alertando del mal trance. Dijo sobre el informe que «es lapidario».
Dijo Robledo que no se trata de un aeropuerto internacional, sino de un aeródromo de mediana complejidad». Destacó que el escaso movimiento que registra, sumado a que está dotado de una aparatología que no es de última generación, y que en todo caso está «desactualizada», lo pone ante la posibilidad de que pueda ser bajado de categoría.
Fuente laboral
El informe del jefe de administración sostuvo que «dada la ubicación estratégica, los aviones que circulan por los cielos argentinos tienen una base de carga de combustible. La preocupación es porque si cayera la actual categoría del aeródromo, éste ya no podría operar de noche y correrían serio peligro las fuentes laborales del lugar». Por otra parte completó señalando que hay riesgo por la fuente de trabajo, y razonó que se podrían perder treinta puestos de trabajo en General Pico.
En razón de ese análisis los diputados de la comisión decidieron pedirle al jefe de administración del aeropuerto piquense, Carlos Roldán, una reunión y visitar el lugar y ver qué se puede hacer para mejorar la situación.
Fuente: La Arena
