No son pocas las publicaciones en Italia que señalan que hoy se llevará a cabo una asamblea extraordinaria de accionistas de la aerolínea Air Italy, para discutir la grave situación financiera de la aerolínea: después de cerrar 2018 con pérdidas de 164 millones de euros, Air Italy habría registrado pérdidas en 2019 por más de 200 millones de euros. Esto provoca que, entre las opciones que serán evaluadas por la junta de accionistas en la asamblea, también se encuentra la liquidación de la empresa.
Air Italy existe con este nombre desde 2018 (antes operaba bajo el nombre de fantasía Meridiana) y pertenece a una compañía llamada Aqa Holding, que está controlada en un 51% por AliSarda, el grupo industrial que también posee la mayoría de las acciones del aeropuerto de Olbia. El 49 por ciento restante le pertenece a Qatar Airways, una de los tres grandes operadores del Golfo Pérsico.
El problema de Air Italy es la recapitalización de la compañía después de las pérdidas de los últimos dos años. La consultora Alix Partner habría presentado a los dos socios una propuesta de relanzamiento para 2020, que, sin embargo, actualmente se consideraría insostenible. Alisarda, encabezada por Karim Aga Khan, un empresario internacional famoso por la construcción de centros turísticos en la Costa Esmeralda, no quiere invertir más capital en Air Italy, y le estaría pidiendo a Qatar Airways que busque nuevos socios dispuestos a invertir en la compañia.
Qatar Airways no puede invertir más de lo que ya puso, para no exceder el límite máximo del 49 por ciento, lo que causaría que Air Italy pierda su certificado de operador en la Unión Europea. A la larga, la razón de la inversión Qatarí: poder ofrecer vuelos entre Europa y USA haciendo uso de la quinta libertad del aire.
Después del cambio de nombre a Air Italy en febrero de 2018, la gerencia de la compañía había anunciado grandes inversiones para hacer que la sucesora de Medidiana, la compañía que conectaba Italia continental con Cerdeña, se convierta en la principal aerolínea nacional, superando así a Alitalia. Pero a esta altura tenemos una certeza inmutable: nada matará a Alitalia. Ni Alitalia misma.
Se anunció un importante esfuerzo de expansión de la flota, que debería haber tenido 50 aviones y 10 millones de pasajeros para 2022, y también se habían introducido nuevas rutas internacionales de larga distancia, para las que el se había elegido a Milán-Malpensa como base.
Esto contábamos en ese entonces:
Con el impulso de Qatar Airways, Air Italy es la nueva marca que reemplazará a Meridiana
Los planes corporativos de recuperación no parecen haber salido según lo planeado y todo fue complicado por la disputa del año pasado con Alitalia sobre las conexiones entre Italia continental y Cerdeña, el hub central de servicios de Air Italy. La disputa se resolvió luego con un acuerdo entre las dos aerolíneas, pero la solución no trajo grandes beneficios a Air Italy y la temporada de verano de 2019 había estado muy por debajo de las expectativas.
Por el momento, la flota de Air Italy consta de 9 aviones, incluidos 3 Airbus para rutas de larga distancia. Luego hay 3 aviones Boeing 737 Max 8 que se utilizaron para rutas de corto y mediano alcance, que están en tierra desde marzo pasado.
Para reemplazar los MAX, la compañía tuvo que entrar al mercado de wet-leasing y contrató servicios de otras aerolíneas, pero en los últimos días se suspendió el último contrato. Además, se están cancelando varias rutas, incluidas las de media distancia a Accra y Lagos. Anpav (la asociación de auxiliares de vuelo) habló de esta cancelación como un hecho que «los trabajadores están alarmados por la situación de la compañía, con la flota en mínimos históricos y agobiada por los costos derivados de la tercerización de sus operaciones por otros transportistas».
Entrevistado por el periódico local La Nuova Sardegna, Arnaldo Boeddu, secretario regional de CGIL (Confederazione Generale Italiana del Lavoro), definió lo que le está sucediendo a Air Italy como «un vaciamiento del que nadie fue informado», y agregó que «nadie, excepto los trabajadores y los sindicatos, se movilizó para evitar la salida de la empresa de Cerdeña, y en mayor medida, de Italia». Según Boeddu, la responsabilidad de esta situación «recae sobre todo en la aerolínea y los gerentes, que no pudieron sacar a Air Italy del estancamiento. Pero además de las responsabilidades de gestión también hay importantes responsabilidades políticas».
No esto y tan seguro de que nada matará a Alitalia, aunque reconozcamos que el enfermo se defiende.
Hola Pablo. ¿Como ves el tema de Alitalia y su panorama futuro? Tengo reservas para fines de Julio y me tiene preocupado. Saludos.
No se va a caer de un día para otro y, por ahora, el gobierno italiano le da pedal.
Te meten en Ar