Boeing anunció ayer jueves que planea reanudar la producción de aeronaves comerciales de manera paulatina en sus instalaciones de la región de Puget Sound, luego de la suspensión establecida a mediados de marzo cuando el COVID-19 desembarcó en Seattle.
«La salud y la seguridad de nuestros empleados, sus familias y nuestras comunidades es una prioridad compartida. Este enfoque por fases nos asegura tener una base confiable de suministros, que los equipos de protección personal estén disponibles y que tengamos todas las medidas de seguridad necesarias para reanudar los trabajos esenciales para nuestros clientes», comentó Stan Deal, presidente y CEO de Boeing Commercial Airplanes.
Según informó la compañía, serán unos 27 mil los empleados de la región de Puget Sound que retornarán a las líneas de producción. La líneas 737, 747, 767 y 777 se reactivarán a partir del 20 de abril, mientras que la del 787 lo hará a partir del 23 de abril. La planta de Carolina del Sur permanecerá con sus operaciones suspendidas.
Boeing también informó que la producción del área de Defensa, en la que trabajan 2.500 personas, se reanudó a principios de esta semana.
Entre las medidas de seguridad contempladas por el fabricante se encuentran realizar cambios de turnos escalonados para reducir el flujo de empleados ingresando y saliendo, señalética especial en pisos para marcar el distanciamiento social, entrega de protectores faciales y solicitar a los empleados que realicen auto chequeos de salud antes de ir a las plantas.