En el marco de su proceso voluntario de reestructuración bajo el Capítulo 11 de la Ley de Bancarrotas de los Estados Unidos, Aeroméxico recibió este lunes la aprobación de la justicia de ese país para modificar la mayoría de sus contratos de arrendamiento de aeronaves y así pasarlos a un modelo de «pago por hora».
Esto permitiría reducir sustancialmente los costos mensuales de arrendamiento de aeronaves y motores, generando además ahorros por sobre las tarifas originalmente contratadas.
Según informaron a través de un comunicado, Aeroméxico celebrará estos acuerdos con 27 empresas diferentes abarcando a 82 aeronaves (de 105 que tiene en su flota) y 14 motores de repuestos.
«Este es un paso significativo en el proceso de reestructuración de Aeroméxico, que facilita el camino para negociar acuerdos a largo plazo con nuestros socios arrendadores sobre los equipos que tiene sentido retener en nuestra flota estratégica», señaló Andrés Conesa, Director General de Aeroméxico.
La aerolínea mantiene sus operaciones con normalidad mientras avanza en su proceso de reorganización. A principios de este mes recibió el desembolso inicial por USD 100 millones del Tramo 1 del DIP financing (deudor en posesión, por su sigla en inglés), cuya segunda parte debería obtenerse a fines de este mes, junto con la primera partida del Tramo 2.