En un comunicado emitido por la Fuerza Aérea Brasilera el pasado miércoles, se informó de la intención de renegociar el contrato con Embraer, para reducir el número de KC-390 a adquirir y ralentizar su ritmo de entrega.
El impacto económico derivado de la crisis global del Covid-19 sería el causante de la reducción presupuestaria de la FAB, que lleva a recortar el pedido de los KC-390.
El comunicado de prensa:
La crisis de salud que enfrenta el mundo desde finales de 2019 ha tenido repercusiones en la situación económica mundial, con impactos también en la situación fiscal y presupuestaria brasileña. Como resultado, los recursos asignados al sector de defensa han estado sujetos a restricciones que limitan directamente los proyectos estratégicos de las Fuerzas Armadas.
En este contexto, la Fuerza Aérea Brasileña, manteniendo su compromiso con las metas presupuestarias y en línea con el escenario actual, decidió revisar los caminos a seguir en la continuación del contrato de producción de la aeronave KC-390 con Embraer.
Debido a la complejidad de este tema, es necesario considerar los diversos aspectos que impactaron directamente en esta toma de decisiones.
El principal problema se refiere a la cifra prevista de 28 aviones en el marco del contrato actual, que, en este momento, ha demostrado ser superior a la realidad presupuestaria de la Fuerza, tanto para la adquisición como para el apoyo logístico a lo largo del tiempo.
Desde el inicio de su operación, la flota de aeronaves KC-390 ha venido presentando índices excepcionales de disponibilidad y despachabilidad, resultando en una capacidad mucho mayor en volumen y agilidad en el transporte de carga y personal, factores que se han observado exitosamente durante las distintas misiones realizadas durante todo el 2020 y 2021.
Así, considerando la situación socioeconómica actual y los altos índices de desempeño de las unidades ya entregadas, el Comando de la Fuerza Aérea entiende que se debe reevaluar el alcance contractual, con un enfoque en adecuar mejor la producción y los intereses públicos.
Cabe mencionar que, incluso en un escenario económicamente estable, ocurren con frecuencia revalorizaciones y cambios contractuales en el mercado de la aviación internacional, por ser un área dinámica y de gran participación.
En resumen, luego de una serie de análisis presupuestarios y estudios operativos iniciados en 2019, con base en las disposiciones legales vigentes, el Alto Mando Aeronáutico determinó el inicio del proceso de negociación del contrato con Embraer. El objetivo será reducir el número total de aeronaves entregadas, con base en el contrato vigente, y buscar una tasa de producción de 02 aeronaves por año, factores considerados adecuados considerando los aspectos operacionales, logísticos y financieros.
Finalmente, la Fuerza Aérea Brasileña refuerza que considera a Embraer como un socio estratégico en la implementación de soluciones y desarrollo de productos tecnológicos, que han sido fundamentales para el pleno cumplimiento de su misión constitucional. Este hecho se evidencia en los proyectos conjuntos que están en marcha, como el estudio para el diseño de vehículos aéreos no tripulados y el desarrollo conceptual de un nuevo avión de transporte ligero.
Brasilia, 26 de mayo de 2021.
Centro de Comunicación Social Aeronáutica
La FAB ya cuenta con 4 Embraer KC-390 en su inventario, y debía recibir otros 2 o 3 este año. El ritmo de entrega pautado era de 3 o 4 aviones por año (un año 3, otro 4) hasta el 2027, totalizando las 28 unidades.
Bajo el arreglo que busca la FAB, el pedio podría reducirse a 18 unidades, o a más de 18 pero menos de 28, extendiendo a su vez el período de entrega más allá del 2027.
De tal forma que Embraer tendrá que redoblar esfuerzos comerciales para compensar con órdenes de exportación los aviones de menos que la FAB no quiera.
Sin duda la cadena de proveedores para el programa KC-390, de la cual FAdeA es parte, estarán expectantes de los resultados de las negociaciones y de qué forma impactará en sus cuotas de producción.