En lo que representa un fuerte impacto para la industria si consideramos la cercanía institucional con su par estadounidense, la Civil Aviation Authority (CAA) del Reino Unido ordenó prohibir todas las operaciones de aeronaves Boeing 737 MAX en su jurisdicción, afectando tanto a las aerolíneas británicas como a las extranjeras que quieran utilizarlas en vuelos hacia su espacio aéreo.
«La CAA ha estado monitoreando de cerca la situación, sin embargo, como actualmente no poseemos información suficiente del registrador de datos del vuelo ET302, hemos decidido, como medida preventiva, emitir instrucciones para detener todo vuelo comercial de pasajeros de cualquier operador, arribando, partiendo o sobrevolando el espacio aéreo del Reino Unido», dijeron en un comunicado.
«Esta directiva de seguridad estará vigente hasta nuevo aviso. Seguimos en contacto con la Agencia Europea de Seguridad Aérea-EASA y con reguladores alrededor del mundo».
Y esta decisión de la CAA británica precisamente pondrá más presión sobre la EASA para avanzar en la toma de decisiones respecto a la puesta en tierra de los 737 MAX.
Si bien en el Reino Unido existen registradas solamente 6 aeronaves de esa familia, que uno de los principales mercados del mundo prohíba su operación genera una fuerte ola expansiva sobre el continente europeo.
SD2019001 CAA UK 737 MAX