Hace dos semanas ocurrió un suceso curioso, un Boeing 737-300, con el registro EK-FAA, de Fly Armenia Airways estaba efectuando un vuelo técnico entre Estonia y Ereván, Armenia. Pero por motivos desconocidos terminó en Irán realizando un aterrizaje de emergencia, y luego no se supo más de él.
La aeronave en cuestión es de una empresa de arrendamiento con sede en Lituania, llamada GetJet Airlines que iba a ser entregado a Fly Armenia, según lo reportaba la empresa.
El vuelo en teoría se dirigía a Hostomel en Ucrania para una revisión de rutina para luego irse a Ereván, según lo comunicaron. Pero sobrevoló Ucrania y terminó inicialmente en Varna, Bulgaria.
Aquí la primera curiosidad: según establece en el Reglamento (CE) nº 2111/2005 del Parlamento Europeo y del Consejo, las aeronaves con registro armenio tienen prohibido el sobrevuelo o aterrizaje en un país de la Unión Europea. Por ende, el Boeing 737 no debía haber arribado a Bulgaria.
Plane Finder aparentemente logró captarlo, dado que la aeronave no se lograba visualizar en las webs de rastreos tradicionales (como Flightradar24), continuando su vuelo hacia Turquía, luego de estar en Varna, pero como este país carece de cobertura ADS-B (el cual permite ese tipo de monitoreo online), la aeronave desaparecía intermitentemente. A lo último se la identificó realizando un aterrizaje en el Aeropuerto Internacional de Mehrabad, Teherán.
El Comité de Aviación de Armenia fue alertado sobre un presunto secuestro del Boeing e inició una investigación, junto con la aerolínea, para lograr conocer el paradero de la aeronave. Según lo cuenta en Facebook del primer ministro armenio, Hakob Tshagharyan, el hecho fue notificado por su homólogo de Emiratos Árabes Unidos.
La aeronave tuvo un cambio plan de vuelo durante su ruta a Ucrania, tomaron la decisión de dirigirse a Sharjah, Emiratos Árabes Unidos, con la excusa que allí mismo se iba a efectuar el mantenimiento programado. Según Tshagharyan, el Boeing terminó en Teherán luego de declararse en emergencia.
Según Fly Armenia, esta situación era ajena a ellos y sin su consentimiento, fue avisado por los agentes de mantenimiento de que la aeronave no llegó a sus instalaciones. El comité investigativo dijo que iban sin pasajeros y los pilotos eran ciudadanos extranjeros.
En el transcurso de los días, en el medio del caos por el Boeing 737, se dio la sorpresa de que la aerolínea iraní Caspian Airlines «adquirió» la aeronave.
Cabe recordar que Irán posee duras sanciones por parte de las autoridades de los Estados Unidos, que impide adquirir cualquier producto de fabricación superior al 10% de origen estadounidense, lo cual incluye las aeronaves y repuestos.
Pareciera que Irán tomó una nueva forma de poder adquirir otras aeronaves. Según el medio holandés Scramble, no es la primera vez que sucede algo idéntico; en diciembre de 2018 un Boeing 737-800 de Norwegian Air Shuttle se declaró en emergencia al sufrir una alerta por bajos niveles de aceite en uno de sus motores, realizando un aterrizaje en Shiraz, Irán.
Con dichas sanciones, los mecánicos iraníes no podían tocar la aeronave. Sumando que en este caso se debía reemplazar el motor, por consecuencia de los fuertes cruces diplomáticos entre ambos países no era factible que ingrese uno nuevo al país.
Luego de dos meses lograron ingresar un motor al país y Norwegian recuperó su aeronave. Pero se cree que Irán ha presionado a Boeing y a la aerolínea noruega en dejar el Boeing 737, por razones diplomáticas y que ellos necesitaban una aeronave moderna.
No obstante, hubo otra situación en la cual Al Naser Airlines, con sede en Irak, validó una compra por cuatro Airbus 340 en 2015. Las aeronaves estaban cumpliendo un vuelo entre Bagdad y Kazajistán para su mantenimiento, luego se declararon en emergencia y aterrizaron en Teherán.
Sin embargo, unas semanas más tarde, esos mismos Airbus 340 comenzaron a lucir los colores de la segunda compañía de importancia de Irán, Mahan Air.
Un caso polémico fue de utilizar otras aerolíneas para canalizar la transacción de aeronaves. Dos compañías de Kirguistán, que actualmente están sancionadas por la Unión Europea, habían notificado que incorporarían ciertas aeronaves que luego terminaron en tierras iraníes. Entre ellos se incluyen Airbus A310 y Airbus A300 que varias empresas de Irán poseen.
Así que el Boeing 737 de Fly Armenia parece ser una más de estas «entregas especiales». Por el momento, las autoridades armenias están investigando el acontecimiento. Se estima que Fly Armenia podría haber sido utilizada como intermediario para la transacción y por otro lado se cree que fue robado.
Pronto lo sabremos y veremos si la aeronave aparece con los colores de Caspian Airlines, como sucedió con los Airbus A340 de Al Naser Airlines que terminaron siendo volados por Mahan Air.
Terroristas y chorros.