En una entrevista con el New York Times Ursula von der Leyden, presidenta de la Unión Europea, manifestó que los turistas estadounidenses que hayan completado su esquema de vacunación podrán visitar la Unión Europea en el verano boreal, una medida reclamada por varios de los países miembros que buscan recuperar la alicaída industria del turismo receptivo.
«Los estadounidenses, por lo que puedo ver, usan vacunas aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos», dijo Von der Leyen en la entrevista en Bruselas. “Esto permitirá la libre circulación y los viajes a la Unión Europea.»
“Porque una cosa está clara: los 27 estados miembros aceptarán, incondicionalmente, a todos aquellos que estén vacunados con vacunas aprobadas por la E.M.A.”, agregó. La agencia, el regulador de medicamentos del bloque, aprobó las tres vacunas que se utilizan en los Estados Unidos, a saber, las inyecciones Moderna, Pfizer / BioNTech y Johnson & Johnson.
Von der Leyden no brindó detalles de cómo se implementarán los controles, y afirmó que la reanudación de los viajes dependerá «de la situación epidemiológica, pero la situación está mejorando en Estados Unidos, y también está mejorando en la Unión Europea».
Una de las cuestiones técnicas a resolver se centra en el tipo de «pasaporte sanitario» que permitirá validar que el pasajero que busca ingresar a la UE haya completado su esquema vacunatorio. De momento, y con la temporada de verano en ciernes, se podría recurrir a una solución simple: un certificado de vacunación emitido por la UE al arribo tras presentar uno válido en el origen antes de abordar.
A mediano plazo sí se buscará compatibilizar una solución tecnológica que proporcione seguridad y trazabilidad en los dos continentes. La propia Unión Europea ya comenzó a proporcionar a sus propios ciudadanos “pasaportes sanitarios”, que indicarán si el viajero fue vacunado contra el Covid-19, se recuperó de la enfermedad en los últimos meses o tiene un test con resultado negativo en los últimos días. Los europeos podrán utilizarlos para viajar sin restricciones adicionales, al menos en principio, dentro del bloque de 27 naciones.
Más allá de lo manifestado por Von der Leyden, cada estado miembro podría imponer medidas restrictivas adicionales si la situación epidemiológica individual lo amerita. Entre los países que más abogaron por una restauración de los viajes turísticos desde Estados Unidos se encuentran Portugal, España, Croacia, Grecia e Italia, que reciben millones de turistas norteamericanos por año y en los que el turismo representa un porcentaje importante de su PBI.