LATAM ampliará su plan de crecimiento de flota convertida a carguera, estimando sumar gradualmente otros 10 Boeing 767-300 BCF (Boeing Converted Freighters) en los próximos años, para llegar a 21 aviones de carga de ese modelo a finales de 2023.
Esto implica sumar dos conversiones más a las anunciadas en los últimos meses, lo que significa que para dentro de dos años el grupo casi duplicará su flota carguera y reducirá la edad promedio de 17 a 14 años. La primera conversión se incorporará a fines de este año.
“La decisión de expandir la flota se basa en que existen oportunidades de crecimiento atractivas, en los aumentos de eficiencia conseguidos y en la flexibilidad que permite el Boeing 767F. Como resultado se podrá crecer rentablemente, incluso en escenarios similares a los enfrentados antes de la pandemia. Gracias a ello, las filiales de carga de LATAM continuarán respondiendo a las necesidades de sus clientes, y apoyando el desarrollo de la región con una mejor y más amplia conectividad”, comentó Andrés Bianchi, CEO de LATAM Cargo.
Desde la empresa destacaron que este crecimiento llevará a los operadores de carga del grupo a expandir y reforzar su presencia desde, hacia y entre Sudamérica, permitiendo consolidar a LATAM como el principal grupo carguero de la región. Inicialmente, detallaron, ya se definió la distribución de la capacidad de las primeras ocho aeronaves para aumentar su oferta en los mercados clave.
“A nivel general se refuerza la conectividad desde Sudamérica hacia América del Norte y viceversa. Específicamente, se robustece la conexión desde Colombia y Ecuador para apoyar la exportación del sector floricultor. También, se reforzará la exportación del salmón de Chile y su mercado importador. Y, en Brasil se aumentará la capacidad desde y hacia América del Norte y Europa, fomentando ambos mercados, exportador e importador”, agregó por su parte Kamal Hadad, Director de Alianzas y Network de LATAM Cargo.
Hadad también destacó que la flexibilidad de la flota carguera le permite a LATAM evaluar múltiples alternativas. “Por ejemplo, las dos conversiones adicionales podrían ser utilizadas para renovar la flota actual o para iniciar nuevos proyectos de crecimiento. El grupo tiene tiempo para tomar las decisiones que correspondan”, concluyó.
Para poder aumentar la capacidad en el corto plazo, los operadores de carga de LATAM utilizarán algunos 767-300ER que están a la espera de ser convertidos bajo un formato híbrido. Con ese fin, se retirarán completamente los asientos de la cabina de tres aeronaves, para alcanzar un payload de hasta 46 toneladas por vuelo. Dos de estos aviones ya se encuentran operativos y se espera que el tercero lo haga durante el segundo trimestre.
Además, LATAM está aumentando la similitud entre sus cargueros 767-300 de fábrica y convertidos para maximizar su capacidad, incluida la posibilidad de transportar carga delicada.
