La Administración Federal de Aviación (FAA) emitió un aviso de propuesta de condiciones para el Airbus A321XLR. En la publicación, el regulador aeronáutico estadounidense solicita garantías de seguridad en torno al tanque central trasero (RCT), el cual está integrado al fuselaje del avión.
El Airbus A321XLR es una nueva variante del integrante más largo de la familia A320. La aeronave cuenta con una ingeniería innovadora, la cual integra un tanque de combustible adicional al fuselaje en la parte posterior al ala.
Este nuevo RCT ocupa parte del compartimiento de carga posterior, además de que su estructura está completamente integrada a la estructura de la aeronave. Las paredes del tanque están próximas a las paredes del fuselaje y la parte superior del RCT está continua al piso de la cabina de pasajeros.
Todas estas características han llamado la atención de la FAA, la cual solicita a Airbus garantice que el RCT podrá resistir cualquier incendio provocado en el exterior, así como también en su interior.
Riesgos potenciales a la seguridad
Gracias al nuevo RCT, el A321XLR contará con una autonomía de 8.700 kilómetros. Con este nuevo alcance podrá realizar cómodamente vuelos transoceánicos e intercontinentales con un tiempo estimado en ruta (ETE) superior a las 9 horas.
La integración del RCT al fuselaje de la aeronave trae consigo un riesgo a la seguridad operacional. Tanto a la FAA como EASA les preocupa el nivel de exposición del RCT ante un incendio en tierra o dentro del mismo tanque.
Las normas de aeronavegabilidad del A321XLR no especifican acerca de la seguridad contra incendios en la estructura o las paredes del RCT, teniendo en cuenta un posible incendio posterior a un accidente, ya que las paredes del tanque de combustible coinciden con el fuselaje del avión.
Además, la inusual posición que ocupa el RCT en la aeronave impide la utilización del aislamiento que suele recubrir el fuselaje de una aeronave comercial.
Condiciones de la FAA
Los fabricantes de aeronaves suelen agregar tanques centrales auxiliares de combustible (ACT) a las aeronaves de fuselaje angosto para incrementar su rango. Tal es el caso del Boeing 737-900ER o del Airbus A321ceo, el cual puede configurarse con hasta tres ACT.
Estos depósitos son dispositivos que se instalan en las bodegas de carga, pero no forman parte de la estructura ni el fuselaje de la aeronave. Esta es la principal diferencia con el RCT del A321XLR, por lo que hasta ahora no se han emitido normativas para estos tanques.
«El RCT integral del modelo A321neo XLR puede o no tener una capacidad equivalente a la de diseños anteriores aprobados con la normativa vigente, debido a que el diseño y la ubicación del RCT son integrales con el fuselaje», dice la publicación emitida por la FAA.
La FAA exige a Airbus que garantice que la sección media inferior del fuselaje sea resistente a posibles incendios provocados por derrames de combustible en el exterior de la aeronave.
Airbus debe demostrar que el A321XLR podrá ser evacuado con seguridad, en caso de un accidente, antes de que se produzca una eventual falla en la estructura del RCT que desencadene en una explosión inminente.
La rotura de las paredes del RCT, o de su estructura, se podrá dar en caso de un incendio en tierra alimentado por combustible o una sobrepresurización causada por la ignición de vapores de combustible en el interior del depósito.
Las normativas actuales están basadas en dispositivos ACT, los cuales no están integrados al avión, como lo está el RCT del Airbus A321XLR.
La FAA realizó estudios, los cuales sugieren que los RCT deberán ser capaces de soportar cualquier tipo de incendio hasta cinco minutos posteriores al suceso. Esto permitirá la evacuación segura de pasajeros y tripulación. Si el RCT cumple con este requisito, la FAA quedará satisfecha.
Además, se le recomienda a Airbus, considere la utilización de un sistema de reducción de inflamabilidad o de mitigación de los focos ígneos para cumplir con los requisitos de la FAA.