En un giro radical sobre su postura inicial, las aerolíneas mandaron a sus empleados a vacunarse contra el COVID-19. Solo se considerarán situaciones excepcionales como eximentes para evitar recibir el medicamento.
Alaska
Alaska Air Group comunicó el jueves 29 de septiembre a sus 22.000 empleados que se les exigirá la vacuna COVID-19. Esto supone un cambio radical respecto a su política previa, ya que había establecido a la vacunación como optativa. La aerolínea solo «animaba y recompensaba» a sus empleados vacunados con un bono de 200 dólares. A los que decidieran no recibir la inoculación, en tanto, mandaba a realizar pruebas periódicas. Pese a no ser obligatoria la vacunación, Alaska había anunciado el mes pasado que alrededor del 75% de sus empleados ya habían recibido el fármaco.
De acuerdo a lo reportado por Seattle Times, Alaska recordó a los empleados -así como los de su subsidiaria regional Horizon Air- que una orden ejecutiva de la Casa Blanca exige a los contratistas del gobierno federal que vacunen a sus trabajadores. En un memo interno dirigido a los empleados de la compañía Andy Schneider, vicepresidente senior de personal, dijo que «después de una cuidadosa revisión de esta orden hemos determinado que los empleados de Alaska, Horizon y McGee entran en el mandato federal de vacunación». Alaska señaló que la fecha límite en la que los empleados deben estar completamente vacunados podría ser «tan pronto como el 8 de diciembre».
La empresa señaló que aquellos empleados que no puedan ser vacunados «por creencias religiosas sinceras o por una condición médica» pueden acreditarlo hasta el primero de diciembre. Si bien se aceptarán estas razones, Schneider señaló que este personal «podrá estar sujetos a protocolos adicionales como pruebas semanales, uso continuo de máscara facial y distanciamiento social, horarios o lugares de trabajo especiales o imposibilidad de asistir a eventos de modo físico».
American Airlines
En un comunicado interno emitido a sus empleados la compañía señaló que, debido al mandato federal de vacunación, el personal de la aerolínea deberá ser vacunado contra el COVID-19.
El memo, firmado por el director ejecutivo Doug Parker y el presidente Robert Isom, señala que debido a la participación de American en varios programas federales (City Pair, Civil Reserve Air Fleet y contratos de carga con el Departamento de Defensa) American está clasificada como contratista del gobierno. Por esto el mandato federal de vacunación requiere que todos los miembros del equipo de American sean vacunados.
La orden ejecutiva no acepta el testeo regular como alternativa; sin embargo, como ocurre con Alaska, quienes no puedan vacunarse debido a cuestiones médicas o creencias religiosas pueden solicitar ser exceptuados del mandato. De no presentar prueba de esto y aún así no recibir la vacuna, estos empleados serán despedidos.
American y Alaska se unen así a United Airlines, que fue la primera gran compañía aérea estadounidense en exigir la vacunación a todos sus empleados. United señaló el martes 28 de septiembre que el 99% de sus 67.000 empleados habían sido vacunados. Dicho esto, la aerolínea comenzó el proceso de despido de 593 personas -número que luego se redujo a 320- que no recibieron la vacuna y tampoco presentaron prueba para quedar incluidas en la exención.
