En la mañana del sábado 27 de julio, un Boeing 737-800 de Flybondi fue remolcado por un vehículo de asistencia fuera de la pista en el aeropuerto de Bariloche. La asistencia del vehículo de tierra fue prestada por las condiciones de pista del aeropuerto «Teniente Luis Candelaria», que presentaba al momento del aterrizaje signos de congelamiento causados por las precipitaciones y las bajas temperaturas de la región.
La presencia de hielo sobre la superficie de la pista reduce el coeficiente de fricción de las ruedas de los aviones, que pueden derivar en inconvenientes de maniobra a bajas velocidades cuando la aeronave gira para despejar la pista. Por tal razón, y de manera preventiva, la tripulación del LV-KJF, que realizaba el vuelo FO5276. Los pasajeros completaron el desembarque sin inconvenientes.
La empresa emitió un comunicado en el que brindó detalles del vuelo afectado y de dos vuelos que debieron ser desviados a Neuquén por la persistencia de condiciones desfavorables en el aeropuerto de destino original.
«Flybondi informa que debido a las condiciones de la pista en el aeropuerto de Bariloche el vuelo FO5276 debió desistir de rodar por propios medios y tuvo que ser remolcado por la falta de control de dirección a causa de estar la pista congelada. Todos los pasajeros fueron desembarcados del avión sin inconvenientes.
Por este motivo los vuelos FO5278 y FO5280 fueron instruidos para aterrizar en el aeropuerto de la ciudad de Neuquén. La operación hacia y desde Bariloche estará condicionada al estado de pista informado por el administrador del aeropuerto.
Lamentamos las molestias ocasionadas a nuestros pasajeros por causas ajenas a la compañía.»