Si normalmente para las compañías aéreas el tiempo es oro, el concepto toma una nueva magnitud bajo la actual crisis en las que están sumidas tras la irrupción del nuevo Coronavirus y las consecuentes restricciones al movimiento de personas implementadas por la mayoría de los gobiernos alrededor del mundo.
Ya la semana pasada desde IATA habían informado que se estima que en Argentina la industria del transporte aéreo perderá ingresos por USD 2,4 mil millones debido al COVID-19, lo cual pone en riesgo a casi 15 mil puestos de trabajo con réplicas esperadas en toda la economía dada la relevancia que tiene.
En una nueva teleconferencia de prensa realizada esta tarde, el vicepresidente de IATA para América, Peter Cerdá, volvió a insistir con la necesidad de que el gobierno argentino avance con medidas concretas que permitan aliviar el impacto que la pandemia del nuevo Coronavirus está infligiendo a la industria aerocomercial.
«Vemos con buenas intenciones el llamado que ha realizado el gobierno», expresó Cerdá en relación al Grupo de Trabajo de Evaluación de Consecuencias Económicas del COVID-19 en el Transporte Aéreo, la convocatoria hecha por ANAC a empresas del sector que habíamos adelantado en Aviacionline el sábado pasado.
«Este grupo va a ejecutar decisiones que el gobierno que tener en cuenta muy rápido. Porque realmente ya es tarde», agregó, destacando que IATA había enviado la primera carta al gobierno argentino el 12 de marzo, otra el 22 de marzo, y que hasta hoy no se han tomado medidas concretas. «Argentina está por detrás de las acciones en comparación con otros países de la región como Brasil, Chile, Paraguay y Colombia», señaló el directivo.
Estas habían sido las medidas solicitadas por la organización:
«El gobierno debe tomar una decisión respecto a cómo puede ayudar económicamente al sector para que éste se encuentre en posición de sostenerse ante la crisis. Si consideramos que en promedio las compañías aéreas tienen caja para soportar dos meses, y ya ha pasado un mes y medio, la mayoría de las compañías no van a estar en condiciones para retomar sus operaciones si el gobierno argentino no aporta un paquete económico», prosiguió Peter Cerdá.
«Hubiese sido deseable contar con este grupo desde el comienzo de la crisis, pero de todas maneras es una iniciativa positiva», agregó por su parte María José Taveira, Country Manager de IATA en Argentina, Paraguay & Uruguay.
«Tan pronto como el virus COVID-19 esté bajo control, la economía mundial tendrá que reconstruirse. Para Argentina es imprescindible mantener su conectividad aérea, ya que el turismo y el comercio exterior son piezas esenciales para que eso suceda. La aviación es uno de los principales pilares de su economía y permite que Argentina pueda ofrecer su belleza natural —playas, montañas, lagos, ríos y mares— su gastronomía, cultura y tradiciones, a turistas de todo el mundo que pueden llegar fácilmente por este medio de transporte a la mayor parte de su territorio”, concluyó Cerdá.
La relación con los proveedores y sindicatos
Consultado por Aviacionline acerca de si además de solicitar ayuda a los gobiernos las compañías aéreas están encarando nuevo acuerdos con grandes proveedores como fabricantes de aeronaves, lessors, concesionarios aeroportuarios y similares, Cerdá dijo que atendiendo la delicada situación de liquidez, efectivamente hay renegociaciones en marcha para lograr reducir costos fijos.
«Hemos escrito a Aeropuertos Argentina 2000 solicitandoles su ayuda para encontrar medidas que beneficien a toda la industria, dado que ellos también han sido afectados por la crisis. Es por eso que pedimos que los gobiernos tengan en cuenta a toda la cadena de valor en los paquetes de ayuda, abarcando también a las agencias de viaje».
Pero Cerdá fue más allá y manifestó que en varios países de la región y el mundo ha existido colaboración entre los sindicatos y las gerencias de las líneas aéreas, trabajando mano a mano con el fin de poder salvar los puestos de trabajo.
Sobre el caso argentino y el mayor poderío de los sindicatos aeronáuticos, el directivo expresó que espera «que los gremios puedan trabajar con la industria por el bienestar de las empresas que les dan empleo. A nivel mundial ha habido mucha comunicación positiva entre ambas partes».
Por el momento en Argentina el mayor ruido sobre este tema ha venido desde la filial de LATAM luego de que hace diez días a su CEO, Rosario Altgelt, manifestara la necesidad de reducir los salarios de los empleados de la compañía en línea con lo que ocurriría en otros países de la región. A esto se sumó el pedido formal ante el Ministerio de Trabajo para avanzar con suspensiones y reducciones salariales del 50% entre abril y junio, cuestiones que han encontrado un profundo rechazo por parte de los principales sindicatos aeronáuticos de Argentina.
¿Y las low-cost?
También consultamos a Cerdá su opinión acerca de que Flybondi y JetSMART no hayan sido incluidas en la convocatoria original realizada por la ANAC (aunque esto luego fue subsanado enviándoles la invitación formal, a pesar de no figurar en la resolución, lo cual había generado suspicacias).
«Todo el sector debe estar representado. Es importante que todos los jugadores participen. Las ultra low-cost que no forman parte de IATA cumplen un rol fundamental, por lo que deberían estar en la mesa», comentó Cerdá.
Sobre la existencia de favoritismos, el directivo reiteró que «las ayudas deben ser transparentes y para todos. Ayudar a una sola compañía no va ayudar al bienestar del país ni su economía. Esperamos que así como en otros países, se ayude a nivel industria mediante paquetes de reducción de tasas e impuestos».
Sería lo ideal pero lo veo inviable. Es más, si pueden hacerle daño a aerolíneas low cost como Flybondi y Jetsmart lo van a hacer, con tal de que vuelva el monopolio de AR.
Hasta que sepas que Maximo Kirchner tiene acciones en Fly bondi… ja ja ja
Tenemos un nuevo patrón. No alcanzaba con el FMI y ahora aparece la mafia de IATA diciéndonos lo que debemos hacer. El escaso dinero en pesosy dólares más la inmensa deuda que nos dejó la ceocracia macrista solo permite que por ahora la prioridad del gobierno sea alimentar a los 11 millones de hambrientos que dejó Macri y solucionar el vaciamiento en salud producido por don Mauricio para hacer frente al coronavirus. Ahora resulta que los que puteaban con el déficit de AR piden que el estado subsidie a la empresita de 5 aviones vetustos de Flybondi. Que le pidan la guita a Dietrich que era pasajero frecuente para irse de joda a P. del Este.
esos 11 millones de personas que macri dejó hambrientos comían asado todos los fines de semanas con el kirchnerismo?
sí, y volaban con Aerolíneas Argentinas todos los fines de semana a sus segundas residencias seguramente ja!
Flaco, sos impresentable. Si tanto te molestan los CEOs, las líneas privadas y/o el capitalismo, podrías irte a vivir a Cuba o Venezuela.
Este tío cerdá no se cansa de hacer lobby para sus amigos, en beneficio de sus propios bolsillos e intereses.
Nada nuevo en el frente de combate. Que vaya al fondo de la fila y espere sentado que lo atiendan…
Claro, porque que las aerolíneas estén bien es sólo interés de los directivos, nadie se beneficia con eso.
Crecen de un repollo los trabajos acaso?
Les dejo un texto de alguien bastante reconocido así no escribo tanto yo !!
Saludos a todos !!
IATA (la organización internacional que nuclea a las empresas aerocomerciales) propone solidaridad en la industria aerocomercial y propone un hashtag #weareaviation o #wearetogether.
Desde @IATA avalaron políticas comerciales engañosas hacia los pasajeros. Vendían pasajes “baratos” y se cobraba fortunas por equipaje extra, lucraban por quien abordaba primero al avión, lucraban por sentar juntos a una familia.
Un agua mineral era fortuna.
Si no hacías el check inn por internet tenía un costo mayor a un pasaje al hacerlo en el aeropuerto….
Todo eso avalaron.
Avalaron la flexibilidad laboral de los trabajadores.
Propiciaron la ingeniería financiera par evitar las cargas previsionales de los trabajadores, propiciaban el trabajo a destajo, sin vacaciones pagas y con el pago del entrenamiento semestral a cargo del propio trabajador. Y hoy quieren que todos seamos la aviación.
Piden subsidios a los Gobiernos e intervención estatal cuando siempre la denostaron y repetían que el mercado todo lo podía….
Espero que salgamos mejores como industria y más fuertes, y NUNCA MÁS sean los trabajadores aeronáuticos vapuleados, hostigados y se entienda la necesidad de una gestión global donde los trabajadores sean importantes siempre y no solamente en las crisis, para ser usados en un hashtag para que las empresas logren prebendas gubernamentales.
quién es ese alguien tan reconocido? IATA no es trigo limpio pero esto que pusiste apesta a naftalina!
Hoy estamos 100 veces mejor que hace 30 años a nivel mundial.