Después de muchas evaluaciones y análisis, Omar Alghabra, Ministro de Transporte, informó que el Gobierno de Canadá aprobó la compra de Transat AT por parte de Air Canada, asegurando que se da bajo condiciones que «resguardan el interés del pueblo canadiense».
La operación fue declarada de interés público, atendiendo la urgencia de la situación financiera de Transat, así como demás factores sociales y económicos que se han visto muy afectados por la pandemia del Covid-19.
Ante esta realidad alarmante, las audiencias públicas, las condiciones de la propuesta elevada al gobierno canadiense y la salud financiera de los estados contables de las compañías fueron determinantes para dar luz verde a la adquisición. Prueba de ello fue la intervención del Comisionado de Competencia de Canadá para garantizar en su informe de marzo de 2020 que esta operatoria no afecte el curso normal del mercado aerocomercial del país.
El acuerdo entre Air Canada y Transat, señalaron, da un marco de previsibilidad tanto para las autoridades de ambas compañías como para los trabajadores, a la vez que garantiza la conectividad y resguarda la continuidad de las rutas a Europa que volaba Transat previamente. Otro detalle importante tiene que ver con los reembolsos, que estaban contemplados en esta adquisición y aporta tranquilidad a los clientes que vieron sus vuelos suspendidos tanto por la pandemia como por la situación de Transat.
Los términos y condiciones comprenden:
• Que otras compañías puedan hacerse de las rutas de Transat a Europa.
• La marca Transat AT continúa, así como la oficina central en Quebec.
• Se sostienen los 1500 empleos de la unidad de negocio para viajes de ocio.
• Siguen vigentes los contratos en Quebec respecto al mantenimiento de aeronaves.
• Mecanismos para control y seguimiento de precios.
• Inauguración de nuevas rutas para los cinco primeros años.
Al respecto de las implicancias que generan esta operación, el ministro de transporte Alghabra declaró: “Dado el impacto devastador de la pandemia de COVID-19 en la industria aérea, la compra propuesta de Transat AT por Air Canada traerá una mayor estabilidad al mercado de transporte aéreo de Canadá. Estará acompañado de condiciones estrictas que respaldarán la futura competencia internacional, la conectividad y protegerán los empleos. Confiamos en que estas medidas serán beneficiosas para los viajeros y para la industria en su conjunto «.
Esta noticia se conoce luego de que la semana pasada Air Transat anunciara que suspenderá por tres meses sus operaciones regulares debido a las nuevas restricciones al movimiento de personas establecidas por el gobierno canadiense.
Críticas de WestJet
La segunda aerolínea más grande de Canadá, WestJet, se mostró profundamente crítica de la decisión del gobierno. Su participación en el mercado doméstico ronda el 35% (frente al 50% de Air Canada).
A través de un comunicado bajo el título «Canadá cerrado para la competencia», el CEO de la aerolínea, Ed Sims, dijo que «esta decisión muestra un descarado desprecio por todos los canadienses que creen en una competencia sana. Cuando los canadienses busquen explorar el mundo y reunirse con familiares y amigos una vez más, enfrentarán menos opciones y tarifas más altas».
«Es difícil imaginar un acuerdo como anticompetitivo en cualquier industria donde el jugador número uno compra el número tres sin remedios significativos», prosiguió Sims, enfatizando que esto implicará un serio revés para la economía canadiense, y que la misma Oficina de la Competencia describió que la eliminación de la competencia entre esas aerolíneas resultaría en precios más altos, menores opciones y reducción de servicios.