LATAM Airlines Group reportó ayer martes (9) sus resultados financieros del último trimestre de 2020 y los consolidados para todo el año, en el que alcanzó cifras negativas récord como consecuencia de la afectación de la pandemia en sus operaciones.
Los ingresos operacionales totales llegaron a USD 897 millones, una caída del 68,7% frente a los últimos tres meses del año anterior, pero una recuperación del 74% en comparación con el tercer trimestre de 2020, lo que marca el ritmo de la recuperación. La pérdida operacional llegó a USD 501,8 millones (USD 350 millones de utilidad operacional en el cuarto trimestre de 2019).
Las pérdidas netas del grupo llegaron a USD 962,5 millones en el último trimestre, cuando durante el mismo período de 2019 había obtenido ganancias por USD 227 millones.
Entre octubre y diciembre el tráfico de pasajeros (en RPK) registró una caída del 71,2% frente al mismo período del año anterior, mientras que la capacidad (en ASK) cayó el 67,1%, dando como resultado un factor de ocupación del 72,4%, 10.5 puntos porcentuales menos. En todos los casos hubo una mejora significativa de alrededor de quince puntos en comparación con el tercer trimestre.
La cantidad de pasajeros transportados se ubicó en 7,4 millones, 62,9% menos que entre octubre y diciembre de 2019 pero 4,8 millones más que entre julio y septiembre de 2020.
Por otro lado, los ingresos por carga llegaron a USD 354 millones, 26,7% más que durante el mismo período de 2019, incluso cuando la capacidad se redujo un 24,1% por la falta del belly cargo (la demanda -RTK se redujo un 10%, provocando que el factor de ocupación se ubique en 66,9%, un incremento de 10,5 puntos porcentuales).
2020
En cuanto a los datos consolidados para el año pasado, LATAM Airlines Group registró ingresos por USD 4.334 mil millones, una caída de 58,4% frente a 2019.
Los costos operacionales llegaron a USD 5.999 mil millones (-38,1%), dando un resultado operativo de -1.655 millones frente a ganancias por USD 741 millones registradas el año anterior.
Contemplando impuestos, costos e ingresos financieros, el grupo cerró con una pérdida neta de USD 4.545 mil millones, cuando en 2019 había obtenido ganancias por USD 190 millones.
En lo que respecta a los datos operacionales, en 2020 el LATAM registró una caída del 65,8% en el tráfico de pasajeros (en RPK), mientras que la oferta (en ASK) se derrumbó el 62,7%, dando como resultado un factor de ocupación del 76,5% (-7 puntos porcentuales).
En total se transportaron 28,2 millones de pasajeros, una caída del 61,9% frente a los 76,18 millones a bordo en 2019.
La carga, que produjo ingresos por USD 1.200 millones (+13,7%), registró una caída del 25,9% en la capacidad y del 12,7% en la demanda, provocando que el factor de ocupación se eleve en 9,9 puntos porcentuales, ubicándose en 65,4%. El grupo seguirá apostando a esta unidad de negocios con especial atención. Recientemente se confirmó un acuerdo con Boeing para convertir ocho Boeing 767-300 de pasajeros a versión carguera.
Al 31 de diciembre de 2020 LATAM tenía USD 1.695 millones en caja que se suman a otros USD 1.300 millones en líneas de financiamiento DIP en el marco del proceso de reestructuración bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.
«El 2020 fue el año más desafiante de la historia para la industria de la aviación y para LATAM. Si bien la crisis del COVID-19 tuvo efectos profundos sobre el grupo y sus operaciones, y los seguirá teniendo por un tiempo, este contexto nos ha permitido tomar decisiones reformadoras. Emergeremos como una compañía más cercana, más simple, más ágil y más eficiente. No tenemos dudas de que cuando la crisis pase, LATAM operará como un grupo fortalecido”, manifestó Roberto Alvo, CEO de LATAM Airlines Group.