TAP Air Portugal ha comunicado este martes (24) sus resultados financieros correspondientes al tercer trimestre de 2023. En el periodo, la aerolínea registró un beneficio neto de EUR180.5 millones, lo que, sobre unos ingresos de EUR1.258 mil millones, supuso un margen neto del 14.3%.
Las cifras se comparan con un beneficio neto de EUR111,3 millones sobre unos ingresos de EUR1.118 mil millones (margen neto del 9.9%) en el mismo periodo de 2022, en lo que suele ser el trimestre de mayor tráfico aéreo en Europa, ya que incluye el punto álgido de la temporada de verano.
Un aumento del 12.5% en los ingresos operativos, frente a un crecimiento de los costes operativos del 1.5%, impulsó la mejora financiera de TAP. Los gastos con combustible, el mayor flujo de costes de la aerolínea, disminuyeron un 23.2% en la comparación con el mismo trimestre de 2022, a pesar de un aumento del 7.1% en las horas bloque.
«Los resultados del tercer trimestre son alentadores y validan el enfoque de la organización en la ejecución de un buen verano a nuestros pasajeros», declaró el CEO de TAP, Luís Rodrigues, en el comunicado de resultados.
«Estamos dando pasos sólidos para mejorar la solidez de nuestra operación y la calidad del servicio que prestamos a nuestros pasajeros, mejorando la recuperación de dos años anteriores difíciles. La significativa mejora de los ingresos, respaldada por unos márgenes operativos resistentes y una fuerte senda de desapalancamiento, demuestran la solidez financiera del grupo en un contexto difícil».
Cabe destacar el empeoramiento de los ingresos de carga de TAP, en consonancia con el enfriamiento de los yields del transporte aéreo de mercancías a escala mundial. Este segmento registró una caída del 40.8% entre el tercer trimestre de 2022 y el mismo periodo de 2023 — aunque con EUR38 millones en ingresos, sólo compone una pequeña fracción del negocio del grupo. En el agregado del año hasta septiembre, esa caída de 2022 a 2023 ha sido del 33.6%.
El anuncio de resultados se produce mientras el Gobierno portugués avanza en el proceso de privatización de TAP Air Portugal, en el que están interesados los tres grupos «legacy» de aerolíneas en Europa (Air France-KLM, IAG y Lufthansa).
«Los resultados son francamente alentadores y muestran que después de un 2022 con resultados históricos, 2023 [será] aparentemente aún mejor y éstas, obviamente, son buenas perspectivas para la privatización», dijo João Galamba, Ministro de Infraestructuras de Portugal, según el periódico Diário de Notícias.
«Esto significa que tenemos una empresa sólida, en crecimiento y sostenible, lo que siempre es una buena noticia». Galamba estuvo en el aeropuerto de Cascais, al oeste de Lisboa, firmando el inicio de los trámites para la migración de las operaciones de los jets ejecutivos desde el aeropuerto lisboeta de Portela.
Con esta medida, según el Expresso, se liberarían unas 20 franjas horarias del aeropuerto de Portela, hub de TAP.
