Norwegian dio a conocer sus resultados para el primer semestre de 2020 y como era de esperar, no fueron para nada buenos. La situación financiera de la compañía ya venían complicadas, y si a eso se suman las complejas condiciones derivadas de la pandemia de COVID-19, le produjo a la empresa noruega una pérdida neta de 600 millones de dólares.
Durante el primer semestre de 2020 viajaron con la empresa 5 millones de pasajeros; una disminución del 71% en comparación con el mismo período del año pasado. A raíz de los números en rojo, Norwegian solicitó un préstamo al estado por un monto de 340 millones de dólares.
Las medidas propuestas por el gobierno de Noruega para mitigar la pandemia de coronavirus respecto a las restricciones de vuelos y circulación de personas obligaron a Norwegian a dejar en tierra 140 aviones y despedir a casi 8.000 empleados. En el segundo trimestre del 2020 solo operó entre siete y ocho aviones en rutas nacionales dentro del país. Tras un exitoso proceso de reestructuración, la empresa logró un préstamo del gobierno de 340 millones de dólares y 340 mil dólares adicionales de los bancos.
“Cuando arrancamos el 2020, esperábamos un resultado positivo y el mejor verano de la historia, gracias a iniciativas exitosas de ahorro de costos y una operación más eficiente. Luego nos vimos afectados por el COVID-19 y la demanda de los clientes se detuvo de un día para otro, por las restricciones de viaje impuestas por el gobierno y las restricciones de viaje adoptadas en todo el mundo. Durante los últimos meses, hemos estado trabajando incansablemente para asegurarnos de que podemos salir de esta crisis como una empresa más fuerte y bien posicionada para la competencia futura. Algunas de estas medidas han sido difíciles (refiriéndose principalmente a la reducción de puestos de trabajo), pero necesarias para salir adelante. Los acreedores, bonistas y accionistas nos han demostrado su apoyo y confianza para encontrar un camino a seguir para la empresa y nuestros clientes están expresando su apoyo, por lo que estoy agradecido a ellos y a nuestros trabajadores que mantienen un espíritu positivo”, dijo Jacob Schram CEO de Norwegian.
Durante los primeros seis meses de 2020, 5,3 millones de clientes viajaron con Norwegian, en comparación con los 18 millones durante el mismo período del año anterior. La producción se redujo en un 69% y el tráfico de pasajeros disminuyó un 72%. El factor de ocupación fue del 78,2%, una disminución de 6,5 puntos porcentuales en comparación con el primer semestre de 2019. Tanto el factor de ocupación como la producción se ajustan de acuerdo con el bloqueo obligatorio del gobierno de los asientos intermedios en las rutas nacionales de Noruega en el segundo trimestre de 2020.
La puntualidad fue del 87,2%, una mejora de 7,3 puntos porcentuales en comparación con el primer semestre de 2019.
El 1 de julio, Norwegian volvió a operar 76 rutas, puso en servicio 15 aviones y trajo de vuelta al trabajo a más de 600 empleados. Hoy en día el mercado aeronáutico sigue siendo muy incierto y a medida que el gobierno cambia las restricciones para volar, cambia también la demanda de pasajes.
El CEO de Norwegian finalizó diciendo: “La crisis del COVID-19 ha afectado fuertemente a la aviación y la industria de viajes, y la mayoría de las empresas necesitan el apoyo del gobierno para sobrevivir. Vemos que muchos de nuestros principales competidores reciben un considerable apoyo económico de sus gobiernos, ya que la aviación representa la columna vertebral de la infraestructura. Estamos agradecidos por la garantía de préstamo que nos proporcionó el gobierno. Sin embargo, dadas las condiciones actuales del mercado, no es suficiente para superar esta crisis que se sigue prolongando”.
Para algunos aquí, seguro la culpa de esta situación la tuvo ARSA, la Cámpora, Recalde y bla bla bla…que no los dejo expandirse en Argentina xD!