Bajo el título «Los sospechosos de costumbre», la Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) de nuestro país publicó un informe en el cual se detallan cuáles son los cinco «asunos clave» que afectan la seguridad operacional en el sistema aeronáutico argentino.
El mismo es fruto del trabajo de investigación de accidentes realizados durante los últimos 18 meses en conunto con la explotación de los datos obtenidos y las recomendaciones emitidas.
«Su publicación apunta a auspiciar una toma de conciencia entre los actores del sistema aeronáutico en general, a la vez de aumentar el nivel de conocimiento de la comunidad sobre estas prioridades en pos de generar el imprescindible apoyo para lograr los cambios necesarios y así reducir los accidentes de aviación civil», dice la JIAAC en la introducción.
Los cinco asuntos clave desarrollados son:
- Deficiencias en la notificación de eventos investigables: la JIAAC ha detectado durante los 18 meses comprendidos en el estudio un total de 16 informes finales que mencionan que el accidente o incidente no fue reportado en dentro de los tiempos establecidos por la ley. «Cada accidente que no se investiga es una puerta abierta a la repetición del accidente, y a la potencial pérdida de vidas y bienes», dice el informe, para destacar la importancia (más allá de la obligación legal) que tiene un correcto reporte de eventos.
- Preservación de los restos de un accidente: la preservación de los riesgos es una obligación de acuerdo al artículo 187 del Código Aeronáutico, replicada el Decreto 934/70 en su artículo 10 y en la RAAC 13.9. Una incorrecta manipulación de los restos provoca que la evidencia se pierda o se vea alterada, produciendo deficiencias no deseadas en la investigación.
- Mantenimiento y aeronavegabilidad de aeronaves de aviación general: el informe dice que se han detectado «deficiencias significativas en la supervisión por parte del Estado, el control y la ejecución de las actividades de mantenimiento por parte de los talleres aeronáuticos», una cuestión gravísima, que fue responsable del 35% de los eventos investigados por la JIAAC entre 2011 y 2015 (129 de un total de 349). A su vez, el 87% de estos eventos que ocurrieron por deficiencias en el mantenimiento y aeronavegabilidad de aeronaves se dieron en operaciones de aviación general. El informe dictamina que el 14% de las aeronaves involucradas en accidentes o incidentes graves no estaban en condiciones de aeronavegabilidad.
- Deficiencias en la instrucción en aviación general: una cuestión que puede levantar mucha polvareda. De acuerdo a la JIAAC, durante sus investigaciones se ha recogido evidencia de «falta de conocimientos básicos de aviación en cuestiones relativas a la operación de aeronaves, incluyendo las condiciones bajo las cuales se certifican sus distintas categorías así como también deficiencias en el desarrollo y/o mantenimiento de las técnicas de control de las mismas. La evidencia disponible atribuye esto a falencias en la instrucción e inspección de los pilotos». Este factor fue responsable del 32% de los eventos investigados.
- Pérdida de control en vuelo (LOC-I): es la condición operativa responsable del mayor número de accidentes fatales (cuatro de cada diez), una característica que se repite a nivel mundial pero que, de acuerdo a la JIAAC, en Argentina se ve potenciada por las deficiencias en la instrucción.
Pueden descargar el informe completo en este link.