Finalmente, la Oficina federal de defensa de la competencia (Bundeskartellamt) emitió su dictamen en relación con las denuncias recibidas contra Lufthansa en relación con prácticas monopólicas en las rutas de cabotaje que ahora opera en soledad, tras la quiebra y disolución de Air Berlin.
Hablábamos de esto en esta nota de diciembre de 2017.
Las denuncias indicaban que Lufthansa incrementó el precio de los pasajes en las rutas domésticas. Se abrió un caso que derivó en la investigación realizada, en la que se analizaron 412 vuelos en 13 rutas, en un período de 44 días.
Se compararon los precios del otoño (boreal) de 2016 con los de 2017 (cuando Air Berlin ya no estaba operando) y con los precios actuales de las mismas rutas. A partir de ese análisis, se llegó a una conclusión.
El presidente de la Bundeskartellamt, Andreas Mundt, dijo » es correcto; los precios de los pasajes de Lufthansa subieron entre un 25 y un 30 por ciento a partir de la insolvencia de Air Berlin, en comparación con el año anterior. Inclusive en algunas rutas el incremento fue superior a ese promedio.»
«Este aumento de precios es ciertamente notable, pero no justifica accionar contra Lufthansa con un procedimiento por abuso de posición dominante.»
Recordemos que tras la quiebra de Air Berlin, sus activos fueron tomados en parte por la misma Lufthansa y por EasyJet, que se quedó con las rutas y gran parte de su personal.
La intervención de los organismos de control permitió que EasyJet vuelva a operar las rutas dejadas por Air Berlin rápidamente, lo que devolvió los precios a los niveles previos a la disolución de la competencia de Lufthansa.
La Bundeskartellamt, consideró como atenuante que la disminución de la capacidad de transporte de esas rutas presionó al alza de los precios, por la mantenida demanda de asientos y la oferta recortada. La dinámica de tarifas funcionando a la perfección.
Pueden leer más sobre la caída de Air Berlin en las notas del año pasado del blog.
