El pasado 18 de octubre entró en operación en el aeródromo de Santa Cruz del estado de Río de Janeiro la primera torre de control remota de América Latina.
La implementación estuvo a cargo del Departamento de Controle do Espaço Aéreo (DECEA), dependiente de la Força Aérea Brasileira (FAB), en conjunto con la Comissão de Implantação do Sistema de Controle do Espaço Aéreo (CISCEA).
El sistema está compuesto por 16 cámaras fijas, dos de ellas con tecnología Pan Tilt Zoom (PTZ), que permiten variar el encuadre y aumentar hasta 24 veces la imagen para así observar con mayor nitidez objetos localizados a kilómetros de distancia. Las cámaras están ligadas a 14 monitores de 55 pulgadas de alta definición que brindan una visión de 360 grados sobre el área controlada.
La tecnología PTZ permite realizar un acompañamiento de las aeronaves, bandadas de pájaros y animales, así como focalizarse en sectores críticos como puntos de espera, todo lo cual contribuye a reducir los riesgos de colisión.
La torre remota brindará los mismos servicios que una torre convencional, como información de vuelo, servicios de alerta, autorización para aterrizajes, despegues y cruces, orientación para rodaje, etc.
La intención del programa, explicaron desde la FAB, es brindar servicio de control de tráfico aéreo en regiones de difícil acceso como en estados o municipios del norte de Brasil.
«No debemos juzgar nuestros días por la cosecha, sino por la semillas plantadas. Estamos seguros que con la inauguración de la primera torre remota del Brasil, hemos dejada plantada una semilla que rendirá excelentes frutos para el futuro del SISCEAB en términos de economía y eficiencia de las operaciones», expresó el Brigadier Mayor Fernando Cesar Pereira Santos, Presidente de la Comisión de Implantación del Sistema de Control del Espacio Aéreo.