Superado lo peor de la crisis del nuevo Coronavirus (al menos en el Viejo Continente), KLM avanza con la recuperación de su red, estimando operar unos 5.000 vuelos dentro de Europa durante julio y 11.000 en agosto. Esto se complementará con 1.900 vuelos intercontinentales en julio y 2.100 para el mes siguiente, de los cuales aproximadamente la mitad serán vuelos cargueros.
Si los comparamos con los 22.000 vuelos mensuales que la aerolínea operó durante el verano boreal de 2019, estos números son mínimos y muestran la devastación del mercado aerocomercial. En abril, piso de la crisis, KLM operó apenas 1.116 vuelos europeos y 612 intercontinentales.
En términos de destinos, KLM estima alcanzar una cobertura del 80% en sus destinos europeos y 75% de sus destinos intercontinentales en julio, y del 95% y 80% respectivamente en agosto, dado que su política se basa en retomar la mayor cantidad de rutas, aunque sea con pocas frecuencias semanales. Esto obviamente estará sujeto a la flexibilización de viajes internacionales por parte de diferentes gobiernos.