No hace falta plan B: El accionista mayoritario votará a favor del paquete de estatización parcial de Lufthansa

Lufthansa será parcialmente nacionalizada nuevamente 23 años después de la privatización para interceptar las peores consecuencias de la pandemia y evitar la bancarrota.

Las condiciones del acuerdo de rescate se confirmaron después de que el accionista principal Heinz Hermann Thiele manifestó que no impedirá la necesaria mayoría de dos tercios con sus votos. «Voy a votar por la resolución», le dijo Thiele al Frankfurter Allgemeine.

El empresario de 79 años, que también es el propietario mayoritario de los grupos Knorr-Bremse y Vossloh, posee el 15,5 por ciento de Lufthansa. Estaba claro que la entrada del estado no habría sido posible sin su aprobación. «Es importante para todos los empleados de Lufthansa que la gerencia pueda llevar a cabo negociaciones rápidas con los sindicatos sobre la reestructuración necesaria», dijo Thiele.

Lufthansa se enfrenta a profundos recortes. El grupo, con 138.000 empleados, afirma que deberá realizar 22.000 despidos. Durante la pandemia, Lufthansa perdió un millón de euros por hora, alrededor de 800 millones de euros por mes. El CEO, Carsten Spohr, planifica operar en 2023 con una flota reducida en 100 aviones.

«Todavía hay diferentes posiciones con los representantes del gobierno», dijo Thiele. Sus dudas no han sido resueltas. Finalmente, sin embargo, no podía votar por la bancarrota. Está claro que, como accionista principal, su inversión estará en riesgo en el futuro. «Es por eso que continuaré siendo influyente en el desarrollo de Lufthansa».

Además de la aprobación ahora previsible de los accionistas para el paquete de rescate, todavía no se ha llegado a un acuerdo con el sindicato Verdi, la organización independiente de tripulantes de cabina, y el sindicato de pilotos Cockpit. Se suponía queestos acuerdos debían ser rubricados antes de la asamblea general.

Pero las negociaciones se prolongaron en el tiempo. Los representantes del personal de tierra, nucleados en el sindicato Verdi, habían anunciado que solo continuarían negociando después de la asamblea de accionistas, el viernes.

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