En respuesta a la Solicitud de Información (RFI, por su sigla en inglés) emitida por la US Navy para su futuro avión de entrenamiento avanzado, que deberá reemplazar al Boeing T-45 Goshawk a partir del 2028, la empresa india HAL ofreció una versión LIFT (Entrenador de Combate Líder) de su caza naval ligero Tejas Mk1.
Según reportes del periódico indio The Economic Times, India envió un plan de proyecto detallado que incluye aviónica avanzada, que permitiría al Tejas LIFT naval, imitar la envolvente de vuelo de casi todos los tipos de aviones de combate.
De acuerdo a lo que habíamos comentado en Aviacionline tiempo atrás, la Armada de los EEUU dio inicio al programa UJTS o Undergraduate Jet Training System (por Sistema de entrenamiento de jet de pre-grado) en mayo de este año. La gran sorpresa, es que no están buscando un avión navalizado. Lo que se está buscando en un entrenador ya desarrollado, que opere desde tierra, se toma al avión casi como está. Se está realizando una búsqueda en el mercado de entrenadores para determinar cuáles aparatos tienen la capacidad de realizar prácticas de aterrizaje rápido en pistas cortas (simular el aterrizaje de aeronaves embarcadas) y que pueda ejecutar las maniobras de “touch and go” sobre portaaviones.
Los candidatos obvios, por ahora, eran los mismos que participaron del programa T-X para el entrenador avanzado de nueva generación de la USAF. Hablo del Leonardo T-1000 (basado en el M-346 Master), el Lockheed-Martin/KAI T-50 y, el ganador de la USAF, el Boeing/SAAB T-7A Red Hawk.
Los requisitos que deben poder cumplir los candidatos al programa UJTS son:
- Debe volar un promedio de 400hs al año
- Debe poder realizar 1200 prácticas de aterrizaje simuladas en portaaviones al año
- Debe realizar maniobras de “touch-and-go” 45 veces por año
- Debe tener una vida útil de 14400 hs
- Se espera que sea capaz de sostener 43200 aterrizajes a lo largo de su vida operativa
- Debe poder alcanzan un techo operativo de 12500 metros
- Debe poder alcanzar velocidades superiores a los 1111 kms/h
- Capacidad de incorporar el Modo de Aterrizaje Preciso (PLM por sus siglas en inglés), utilizado por los Super Hornet
Según HAL, el conglomerado aeroespacial indio fabricante del Tejas, su aeronave cumple con todos estos requisitos. La enorme ventaja que tiene por sobre la competencia, es que se trata del único candidato diseñado para operar desde la cubierta de los portaaviones.
Las razones de la Navy para no encarar el desarrollo de una versión embarcable de alguno de los entrenadores arriba citados, podrían encontrarse en los tiempos y costos de tal conversión. De una parte, se pretende tener las primeras unidades operativas del nuevo entrenador para el 2028 o antes, lo cual no deja tiempo para el rediseño importante que implica la navalización. A lo que se le sumarían los costos crecientes. Nuevo diseño, pruebas, certificación, etc. Todo eso puede derivar en una espiral creciente de costos, de difícil control.
Pero el Tejas Naval existe ahora, y como caza y entrenador biplaza ligero con capacidad de operar desde la cubierta de portaaviones, es único en su tipo en el mundo.
La propuesta de HAL, podría ser la solución perfecta que la US Navy no imaginaba. Pero no todo es tan fácil.
Pros y Contras
Quedarse con el contrato de 200 entrenadores del UJTS para la India podría significar un espaldarazo enorme al programa Tejas y una ganancia en prestigio fenomenal, que pondría a su industria aeronáutica al fin en el mapa.
Para los pilotos navales de la US Navy, podría significar que no van a tener que renunciar a la irreemplazable experiencia de realizar sus entrenamientos de apontaje y despegue por catapulta, desde un verdadero portaaviones. Por más avanzadas que sean las simulaciones actuales, no hay nada que reemplace a la experiencia real.
Por otro lado, EEUU tiene a la India como un mercado de armamento de importancia creciente, muy codiciada desde hace años. Boeing promociona fuertemente al F/A-18E/F Super Hornet para la aviación naval de la Marina India, como complemento de los MiG-29K. A su vez, Lockheed Martin trata de quedarse con un contrato de la Fuerza Aérea (IAF) por 114 cazas, tentándolos con el F-21 (que es una versión del F-16 Block 70, a fabricar en la India). Un arreglo nación-nación en la que EEUU adquiera el Tejas para su aviación naval, podría tener su correlato en la selección de los cazas estadounidenses para las FFAAs indias. Lo que se dice un win-win.
En cuanto a los aspectos “menos brillantes”, podríamos señalar que tanto Boeing (T-7A) como Lockheed Martin (T-50) tienen sus propios caballos para esta carrera. Resulta difícil pensar que fueran a cambiar y pasar a respaldar la producción del Tejas Mk1.
Hal tendría que elegir a otro socio norteamericano, tal vez Northrop Grumman, pero ésta no tiene ningún sistema aéreo avanzado concursando en el mercado indio, con lo que la capacidad de hacer lobby a favor del producto de HAL, no sería tan alta.
Y hay aspectos técnicos a tener en cuenta. Si bien el Tejas naval es un proyecto avanzado, no está terminado aún. En el 2016 el jefe de la Armada de la India rechazó el avión en la forma en que estaba en ese momento. Sin embargo, a principios de este año, el LCA Tejas despegó y aterrizó con éxito en la cubierta del portaaviones INS Vikramaditya en el Mar Arábigo.
Si la Armada de EEUU preselecciona al modelo indio para la siguiente fase del programa, HAL producirá un demostrador del Tejas naval, adaptado a las demandas de la Navy para un entrenador avanzado.
Otro aspecto importante es el industrial y la falta de confianza en los sistemas avanzados indios. HAL, y el programa Tejas en particular, vienen sufriendo una larga serie de demoras y sobre-costos debidos a problemas de calidad de sus piezas y las dificultades de cumplir con los tiempos de entrega comprometidos. Pero la asociación con una compañía aeroespacial norteamericana podría solucionar estas deficiencias, y HAL lograría obtener un gran know how de cómo organizar y llevar adelante su producción.
Sea como fuere, la irrupción del HAL Tejas en el programa para el nuevo entrenador de la US Navy es de lo más interesante. Creo que va a dar que pensar a los oficiales seleccionadores en EEUU, y podría convencer a la oficialidad e la Armada India de que vale la pena seguir invirtiendo recursos en el desarrollo de esta aeronave. Tal vez resulte ser un buen negocio tanto para India como para EEUU, si se ponen de acuerdo. Pero sobreponerse a la falta de confianza de los productos indios, no va a ser fácil.