La compañía británica de energías limpias y sustentables, Clean Planet Energy, anunció el lanzamiento de un nuevo producto que puede reducir en un 75% las emisiones de CO2 de los medios de transporte que aún utilizan combustibles fósiles. Se trata de un queroseno para aviones llamado Clean Planet Air, creado a partir de desechos plásticos que no son reciclables.
Sabiendo que en 2019 se consumieron 360 billones de litros de combustible fósil y que en un próximo futuro con la nueva normalidad despegarán 75.000 aviones por día, generando una emisión de 250 kg por pasajero a bordo por cada kilómetro recorrido en vuelos domésticos, es que la empresa decidió tomar esta iniciativa y expandir su negocio a la industria aeronáutica.
Con estos datos Clean Planet se propuso recoger 1 millón de toneladas de desechos plásticos que se encuentran en el ambiente para, en el espíritu de la economía circular, convertirlos y poder ser reutilizados y transformados. Esto es posible gracias a sus ecoPlants que convierten el plástico en combustibles ultralimpios y materia prima petroquímica.
Este nuevo combustible además de disminuir las emisiones de carbono también reduce las de dióxido de nitrógeno y óxido de azufre, sustancias tóxicas responsables de 9.000 muertes prematuras por día a nivel mundial.
Desde Clean Planet Energy se encuentran trabajando con las autoridades locales y de Europa para generar una solución sostenible en el tiempo.
Actualmente poseen dos plantas en construcción, en Teeside y Suffolk, Reino Unido, con otras cuatro en proceso de desarrollo.