Luego de permanecer en tierra por casi tres meses debido al impacto en la demanda producto de las restricciones al movimiento de personas impuestas por el gobierno para contener la segunda ola de contagios de COVID-19, Canaryfly, la autodenominada única low-cost de Canarias, anunció sus planes de reinicio de operaciones regulares a partir del próximo 22 de marzo.
Inicialmente la empresa operará un promedio de 34 vuelos diarios en las 8 rutas que unen a El Hierro, Fuerteventura, Gran Canaria, La Palma, Lanzarote y Tenerife, ofreciendo unos 70.000 asientos mensuales.
Para darle un mayor impulso a la demanda durante esta etapa clave, Canaryfly promociona que más de 22.000 de esos asientos se venden a la tarifa super precio, desde solo 5 euros.
«El hecho de mantener parte de los billetes a precio de oferta, demuestra una vez más el férreo compromiso de Canaryfly con la sociedad canaria. Somos conscientes de la complicada situación económica actual que sufren muchos canarios. Por eso hemos decidido mantener una buena parte de nuestras plazas, más del 40% del total, al precio más bajo posible”, manifestaron desde Canaryfly a través de un comunicado de prensa.
Durante la primera ola de contagios de COVID-19 en España la aerolínea también se había visto obligada a suspender sus operaciones de pasajeros entre abril y junio de 2020, por lo cual se volcó al mercado carguero tanto entre las Islas Canarias como en la península Ibérica y África adaptando su flota. En diciembre empezó a operar su primer ATR 72 convertido a carguero puro.
Canaryfly fue fundada en 2008 y tiene su base principal en el aeropuerto Gran Canaria. Originalmente también cubría destinos internacionales pero en 2012 decidió enfocarse en el mercado interinsular. Su flota se compone de siete aeronaves ATR 72-500 con capacidad para 72 pasajeros.
La empresa compite de manera frontal contra un clásico del archipiélago, Binter Canarias. De acuerdo a información obtenida por Aviacionline a través de Cirium, para abril la oferta de asientos en los mercados insulares en que ambas compañías coinciden se reparte en un 82% para Binter y un 18% para Canaryfly.