El ministro de Defensa de Corea del Sur expresó su confianza en que el caza KF-21 Boramae, en desarrollo, desempeñe un «gran» papel en la disuasión de las amenazas norcoreanas.
Según la agencia de noticias Yonhap, el ministro de Defensa Lee Jong-sup hizo estas declaraciones en una ceremonia en la que se celebraba el primer vuelo del avión que Corea del Sur espera poner en servicio a partir del 2026, a fin de reemplazar a la envejecida flota de cazas F-4 y F-5 de la Fuerza Aérea de la República de Corea (ROKAF).
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Construido por Korea Aerospace Industries Ltd. (KAI), el caza realizó con éxito su vuelo inaugural en julio, pero, según afirma Yonhap News, la prueba se llevó a cabo sin ninguna ceremonia dirigida por el gobierno debido, en parte, por las incertidumbres sobre si el vuelo tendría éxito o no.
«Estoy agradecido a KAI, a la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa (DAPA), a la Fuerza Aérea, a las empresas relacionadas, al mundo académico y a los institutos de investigación que se han dedicado al desarrollo del caza KF-21», dijo Lee.
«El KF-21 será una pieza clave para la defensa aérea que dominará los futuros campos de batalla y desempeñará un gran papel en la disuasión de las amenazas norcoreanas», añadió.
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A la ceremonia asistieron altos funcionarios de Seúl, entre ellos el ministro de Defensa, Eom Dong-hwan, director de DAPA, y el jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, el general Jung Sang-hwa, así como el viceministro de Defensa indonesio, Muhammad Herindra.
La participación de un alto funcionario indonesio en la ceremonia parece indicar que el país sigue siendo socio del programa KF-X. Pero en los últimos tiempos, no surgió ninguna información de que Indonesia haya pagado los costos de desarrollo adeudados a Corea del Sur.
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Funcionarios de la DAPA dijeron que la ceremonia del miércoles tenía por objeto demostrar la capacidad del caza KF-21 para llevar a cabo su misión de vuelo con seguridad.
«Un éxito en el desarrollo de un caza de estilo coreano significa que el país se convertirá en un país avanzado que utiliza sus aviones de producción propia para el entrenamiento de pilotos de la Fuerza Aérea y la defensa de su aire territorial», dijo un funcionario de la DAPA.
Los prototipos del KF-21 deberán realizar más de 2.000 salidas para completar el proceso de desarrollo antes de 2026.
