Pocos días después de dar a conocer su intención de incrementar el ritmo de producción del modelo, Boeing confirmó que algunas entregas de aeronaves 737 MAX se detendrán temporalmente como consecuencia de un defecto en una pieza provista por la empresa Spirit AeroSystems.
Luego del anuncio, las acciones del fabricante estadounidense cayeron un 5.3%, mientras que las del proveedor se desplomaron un 11.8%. En febrero pasado, Boeing suspendió temporalmente las entregas del 787 Dreamliner para llevar a cabo un análisis adicional sobre un componente del fuselaje también provisto por Spirit AeroSystems.
Ver también: Boeing suspende nuevamente las entregas del 787 para revisar un componente del fuselaje
Boeing detiene las entregas de algunos 737 MAX
De acuerdo con un reporte de Dominic Gates para The Seattle Times, Boeing deberá trabajar para solucionar el problema en algunos aviones ya terminados pero aún no entregados a sus clientes, así como en otros que se encuentran actualmente en la línea de montaje.
Según Gates, Spirit AeroSystems notificó el último miércoles a Boeing sobre un problema en el proceso de instalación de dos herrajes en la zona de unión del fuselaje con la cola de algunos aviones 737 MAX 7, MAX 8 y MAX 8-200, así como en la aeronave militar P-8. Los 737 MAX 9 utilizan otros accesorios, por lo que no se ven afectados.
El proveedor explicó que el inconveniente podría remontarse cuatro años atrás. En ese caso, afectaría a la mayoría de los aviones construidos desde el establecimiento de la suspensión de operaciones del modelo, en marzo de 2019.
En un comunicado de prensa, Boeing dijo que no el problema no afecta la seguridad en vuelo y que las aeronaves actualmente en servicio continuarán operando de forma normal. No obstante, la situación perjudicaría a «un número significativo» de entregas pendientes.
A diferencia de lo ocurrido tiempo atrás con el 787 Dreamliner, las inspecciones necesarias se llevarán a cabo en una zona accesible de la estructura, por lo que el impacto sobre el calendario de entregas sería minimizado.
La empresa quiere incrementar la producción
A comienzos de esta semana, Boeing comunicó que proyecta recuperar el nivel de producción de su último modelo de fuselaje estrecho.
Según fuentes anónimas citadas por Reuters bajo condición de anonimato, la compañía preveía aumentar la producción mensual hasta alcanzar las 38 unidades en junio próximo. El ritmo continuaría creciendo hasta fabricar 42 aeronaves en enero de 2024 y 47 a mitad de ese año. Boeing quiere producir hasta 52 737 MAX en enero de 2025.
En los últimos meses, el rápido aumento de la demanda superó, en muchos casos, la capacidad del sector para adaptarse y mantener un servicio adecuado. Como consecuencia, los fabricantes aeronáuticos enfrentan problemas derivados de las demoras en las entregas por parte de proveedores pequeños y medianos.
Esto generó retrasos generalizados en las entregas a las aerolíneas. Tanto Boeing como Airbus prevén que estas condiciones se mantengan, al menos, hasta 2024.