La industria de defensa rusa vuelve a tener una fuerte presencia en el Dubai Air Show 2023, una de las grandes ferias de la industria aeroespacial fuera de la esfera “occidental”, en donde puede exhibir sus productos a potenciales cliente y socios. Y durante el primer día del salón aeronáutico, fuentes gubernamentales rusas afirmaron estar interesadas en conseguir clientes para el Su-57E, la versión de exportación del caza de quinta generación ruso, al tiempo que también buscan socios interesados a participar del programa de desarrollo del Su-75 Checkmate.
Su-57 de Exportación
Según la agencia de noticias Interfax, el Servicio Federal de Cooperación Técnico-Militar (FSMTC) de Rusia anunció su disposición a comenzar a estudiar la cuestión de la exportación del caza de quinta generación Su-57, si recibe solicitudes de clientes extranjeros.
Some new figures on the Su-57.#DAS23 pic.twitter.com/F89Kquu4Pi
— Michael Jerdev (@MuxelAero) November 13, 2023
«El Su-57 es el último caza de quinta generación. Hoy en día, la tarea principal es cumplir la orden de defensa estatal y satisfacer las necesidades del cliente ruso: el Ministerio de Defensa de la Federación Rusa. Si nuestros socios extranjeros se ponen en contacto con nosotros, Estamos listos para empezar a trabajar en este tema”, dijo el FSMTC de la Federación Rusa en relación con el Salón Aeronáutico de Dubai.
FSMTC señaló que varios clientes ya están mostrando «un mayor interés» en el avión Su-57E.
Y el Su-75 Checkmate
Checkmate es un proyecto para un avión de combate ligero multi-rol de nueva generación, desarrollado por Sukhoi, que incorpora soluciones técnicas avanzadas, pero adaptadas de las tecnologías ya desarrolladas para aviones como el Su-57 Felon o el MiG-35 Fulcrum. Fue presentado al público por primera vez Salón Internacional de Aviación y Espacio MAKS-2021, y ese mismo año también estuvo presente en el Dubai Air Show 2021, lo que indica la importancia que da Rusia al interés de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y a otros potenciales clientes de la región de Medio Oriente y Asia.
Si bien se espera que el primer vuelo del Su-75 se realice en 2025 y la producción en masa comience en 2027, aún hay mucho camino de desarrollo para recorrer y variantes que desarrollar (como la versión no tripulada), lo que deja abierta la posibilidad de la incorporación de socios extranjeros al programa, en particular aquellos con capacidad de financiamiento, como es el caso de EAU.
«En cuanto al avión Checkmate, estamos abiertos al diálogo y la cooperación con socios en este proyecto en diversos formatos de interés mutuo», comentó al respecto el departamento de prensa de FSMTC.
La reticencia de Estados Unidos de vender el Lockheed Martin F-35 en la región (más allá de Israel), podría ser la oportunidad que Moscú necesita para exportar sus sistemas de armas de “elite” a clientes cuyas necesidades en Defensa son grandes, y tienen la billetera para pagarlos.
LeLe llueven los pedidos ( Risas )
Rusia no se cansa de hacer el ridículo
Pues el tema de EAU-Rusia no es baladí, ya que los emiratíes han mostrado su interés en adquirir la participación indonesia (y parte de la estatal surcoreana, que ha ido optándo por adquirir más F-35A en detrimento del programa local de la corporación KAI).
Fondos con los que Yakarta pretende pagar sus cazas semi-furtivos Sukhoi Su-35SK rusos (a los que los franceses ya buscan imitar con el Dassault Rafale F5 a rebufo eslavo para el mercado indio y el propio emiratí, y gracias a lo que salga del problemático Programa FCAS comunitario europeo), los que Rusia estudia (cuales reactores Su-35SK ex-egipcios, ya en manos iraníes) suministrar a Pyongyang. Indonesia, como Egipto, estándo también acorbardada por las indiscriminadas sanciones y presiones occidentales contra terceros países en relación a Rusia. Más viendo los indonesios como se deploman mortalmente los nuevos F-15s de sus vecinos nipones, cuyo mismo modelo les ha ofrecido EE.UU. como alternativa a finalmente recibir sus Su-35s de Rusia.
El tema está en si Moscú ofrece una factura del Sukhoi Su-75E menor y equivalente (hasta con co-producción) al KF-21 surcoreano al que ya mira Abu Dhabi.
Ya que Emiratos no quiere depender ni de Francia como el Irak de Saddam o de Estados Unidos como el Irán de 1979 a la hora de disponer de una política nacional independiente en Defensa. Ni tampoco estar como los indonesios, tailandeses y malasios a merced de distintos proveedores cambiantes.
Si el desarrollo del Su-30 lo pagó Nueva Delhi, el Su-35 lo financió Pekín y el Su-57 los propulsó también India (antes de retirarse, de ahí que Moscú busque un nuevo socio de exportación para abaratar y ampliar su producción nacional actualmente); el Su-75 podría ser financiado por los emiratíes para una nueva generación, de cara a su incorporación en la avicación militar rusa a un bajo coste y gran número.
Y en eso están los rusos, junto con impulsar su producción de MiG-35 (buscando el contrato con México, y ahora Colombia tras su choque con Tel Aviv), Su-34, Su-35 (para Norcorea e Indonesia), Su-39 y Su-57 para reemplazar los aviones de origen soviético MiG-29, Su-25, Su-24, Su-27/33, Su-33KUB; predominantemente utilizados (y perdios en casos) en Ucrania por la aviación de mercenaria de Wagner.
Sin estridencias que no se puedan pagar a futuro, que algo aprendieron de la anterior guerra fría y la dura postguerra.