No hay plata: Indonesia busca reducir (todavía más) su participación en el programa del caza surcoreano KF-21 Boramae
Indonesia ha propuesto reducir su contribución financiera a un proyecto conjunto de desarrollo de un caza con Corea del Sur, según fuentes familiarizadas con el asunto citadas por Yonhap. La nación del sudeste asiático sugirió reducir su pago a aproximadamente un tercio de su compromiso original debido a preocupaciones continuas sobre pagos atrasados.
La reducción propuesta haría que la contribución total de Indonesia al proyecto del caza KF-21 se reduzca a 600.000 millones de wones (US$442.3 millones), un contraste marcado con el casi 20 por ciento del presupuesto del proyecto de 8.1 billones de wones que se acordó inicialmente en 2015. El ambicioso proyecto tiene como objetivo desarrollar un caza supersónico avanzado para 2026.
Originalmente, Jakarta se comprometió con la inversión a cambio de obtener un modelo prototipo, transferencias de tecnología y los derechos para producir 48 unidades del caza en Indonesia. Sin embargo, propuestas recientes han indicado un deseo de reducir la cantidad del pago a cambio de menos transferencias de tecnología.
Hasta la fecha, Indonesia ha contribuido aproximadamente 300.000 millones de wones (alrededor de 220 millones de dólares) al proyecto pero ha tenido dificultades para cumplir con los plazos de pago programados, lo que genera dudas sobre su compromiso con el cronograma de desarrollo. Esto ha resultado en una tensión financiera sobre el proyecto y ha provocado discusiones sobre el futuro de esta colaboración internacional.
El año pasado, funcionarios indonesios solicitaron que Corea del Sur les permitiera diferir los pagos hasta 2034. Sin embargo, Seúl ha mantenido una postura firme, insistiendo en que los pagos continúen según el calendario original con una fecha límite final en 2026.
Un funcionario gubernamental informó que las discusiones continúan con el gobierno indonesio, y aún no se ha tomado una decisión final sobre la aceptación de esta nueva propuesta.
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El resultado de estas negociaciones podría impactar significativamente en la asociación y el futuro del proyecto del caza KF-21, subrayando los desafíos de mantener colaboraciones internacionales de defensa en medio de incertidumbres financieras.
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