La aerolínea canadiense Cargojet Airways, especializada en transporte aéreo de carga, ha realizado, a lo largo de los últimos meses, vuelos no regulares con sus aeronaves Boeing 767-300ERF con destino a São José dos Campos, en el interior de São Paulo, reconocida por albergar la sede del gigante aeronáutico Embraer.
Con el paso de los meses, la conexión se ha convertido en un «puente aéreo» entre Montreal y São José dos Campos, con una gran recurrencia de vuelos, todos ellos vinculados exactamente a Embraer y destinados al transporte de motores fabricados por Pratt & Whitney, que equiparán las aeronaves E2, la segunda generación de los exitosos E-jets, según reporta nuestro medio asociado en Brasil, Aeroin.
Y a pesar de los varios vuelos ya realizados, se espera que la conexión perdure por más tiempo, ya que, según fuentes cercanas al fabricante de aeronaves, el contrato con P&W prevé el transporte de un total de 80 motores, que equiparán 40 aviones producidos en Brasil.
Más allá del impacto logístico inmediato, el vuelo especial también subraya la importancia de la infraestructura y las capacidades del Aeropuerto de São José dos Campos, que ha visto un notable incremento de operaciones de carga de gran porte en los últimos meses, incluyendo el establecimiento de una conexión regular con Miami.