Luego de batir más de 50 récords con el Global 7500, el equipo de demostración de Bombardier volvió a completar una hazaña aterrizando en uno de los aeropuertos más peligrosos del mundo.
El Aeropuerto de Paro, en Bután, cuenta con una pista de aterrizaje de 2265 metros de longitud a una altitud de 7364 pies (2244 metros sobre el nivel del mar) en el corazón de los Himalayas.
Según destacó Bombardier en una publicación en sus redes sociales, el aterrizaje del Challenger 3500 en Paro requirió semanas de preparación, durante las cuales el equipo de demostración de Bombardier debió instruirse sobre las difíciles aproximaciones que permiten aterrizar de manera segura en el Aeropuerto de Paro, debido al terreno montañoso de gran altitud que lo rodea.
Esto puso a prueba las capacidades del reactor ejecutivo, destacando la sinergia entre la agilidad de la aeronave y el control del piloto.
After leading us to setting over 50 records on our Bombardier #Global7500, our Demo team achieved another incredible feat, this time with our award-winning #Challenger3500 jet.
After weeks of preparation, they flew the Challenger 3500 through the Himalayas to Bhutan to land at… pic.twitter.com/YziP2JqNvQ
— Bombardier (@Bombardier) September 26, 2024
Aproximaciones a Paro
Como podemos observar en las cartas de aproximación al Aeropuerto Internacional de Paro, el procedimiento requiere que las aeronaves tengan capacidad RNAV. Las aproximaciones a ambas cabeceras de la pista serpentean a través de valles escarpados hasta llegar prácticamente al umbral.
Además de estar a una altitud superior a los 2.000 metros sobre el nivel del mar, otro factor que torna aún más peligrosa la aproximación a Paro es la meteorología.
Al ser un terreno montañoso a gran altitud, los pilotos podrán encontrarse con formación de nubes repentina, con ocasional formación de hielo y, además, al tratarse de valles angostos se puede esperar vientos moderados y de dirección variable, y turbulencias por corrientes ascendentes.
Operadores comerciales regulares
Por la dificultad que presenta la aproximación, no cualquier piloto puede aterrizar allí. Para volar en el Aeropuerto Internacional de Paro se requiere un entrenamiento y certificación especial.
Actualmente operan dos compañías nacionales: Bhutan Airlines y Druk Air. Bhutan Airlines cuenta con una flota compuesta por dos Airbus A319, con los cuales vuela a Katmandú, Nepal; y Calcuta y Delhi, India.
Por su parte, Druk Air cuenta con una flota compuesta por tres Airbus A319, un Airbus A320neo y un ATR 42-600. Desde PHB vuela a Gelephu, Jakar y Trashigang, en Bután; Katmandú, Nepal; Daca, Bangladesh; y Bangkok, Tailandia.