Las estrellas del fútbol mundial no solo son conocidas por sus habilidades en la cancha, sino también por el estilo de vida extravagante que llevan fuera de él. Con salarios que pueden superar los millones de euros al mes, patrocinios y contratos publicitarios, estos atletas se destacan entre los más ricos del mundo.
Con un total combinado de casi medio billón de euros anuales solo entre los diez principales jugadores del Campeonato Europeo de 2024, no es sorprendente que muchos de ellos opten por exhibir su fortuna a través de jets privados.
Entre los jugadores, Toni Kroos, exestrella del Real Madrid, admitió gastar hasta 220.000 euros por partido fuera de casa solo para volar en un jet privado y estar junto a su familia. Este compromiso de no pasar ni una noche lejos de su esposa e hijos ilustra bien cuán valioso es el tiempo para estos atletas.
Uno de los fabricantes que ha conquistado los corazones de muchas estrellas del fútbol es la compañía estadounidense Gulfstream. La popularidad de la marca se refleja en los jets de algunos de los jugadores más reconocidos, de acuerdo a un reporte de nuestro medio asociado, Aeroin.
Por ejemplo, Cristiano Ronaldo es propietario de un impresionante Gulfstream G650, conocido por su autonomía de más de 12.000 kilómetros y velocidad máxima de 982 km/h. Este lujoso jet tiene capacidad para hasta 18 pasajeros y está equipado con modernas amenidades, frecuentemente mostradas en redes sociales, especialmente por su pareja Georgina Rodríguez.
Lionel Messi no se queda atrás, poseyendo un Gulfstream V con una impresionante autonomía de 9.600 kilómetros y una velocidad de 850 km/h. El jet, que lleva la matrícula LV-IRQ, tiene espacio para 16 personas y ha sido personalizado con un toque personal: su icónica camiseta número 10 está estampada en la cola, junto a los nombres de su familia en las escaleras del avión.
Otro nombre destacado es Paul Pogba, actualmente en la Juventus, quien optó por una versión diferente de Gulfstream, el G280. Con espacio para 9 pasajeros y un alcance de alrededor de 6.700 kilómetros, el jet del francés es otro ejemplo del estilo exuberante de los jugadores de élite.
Por su parte, el brasileño Neymar, en su travesía por el fútbol saudita, posee un Citation Sovereign 680 (de matrícula PR-SMK) y un Falcon 900EX (matrícula PS-NJR, imagen de apertura). El primero ofrece una autonomía de vuelo de aproximadamente 5.200 kilómetros y una velocidad máxima de 849 km/h, acomodando hasta 12 personas. El segundo puede volar alrededor de 8.000 km con capacidad para 12 pasajeros.
Zlatan Ibrahimović también se suma a las estrellas con su Cessna Citation Longitude, un jet ejecutivo que puede volar hasta 6.500 kilómetros, lo que refleja el estilo de vida lujoso que disfrutan estos atletas.
Esta lista no es exhaustiva, ya que muchos otros jugadores de renombre también poseen jets ejecutivos, pero sirve para ilustrar cómo viajan algunos de los mayores astros del fútbol.
Estos jets privados no solo son un símbolo de riqueza, sino también un reflejo del estilo de vida de las estrellas del fútbol, que buscan comodidad y estilo durante sus viajes por el mundo. En el universo del fútbol, la aviación privada se ha convertido en más que una necesidad; es una extensión del estatus y la personalidad de cada atleta.