Spirit Airlines retira su flota A319 buscando reducir pérdidas ante posible quiebra 

Claudio Benites

Spirit Airlines retira su flota de A319 gradualmente, en medio de crecientes pérdidas y rumores de una inminente declaración de bancarrota.

La medida se produce en un momento en que la aerolínea de bajo costo racionaliza su flota de Airbus a los A320 y A321 para aumentar la homogeneidad y la flexibilidad dentro de su flota restante, según informó Aerotime.

De acuerdo a la firma independiente de análisis de aviación Ishtron y a lo informado por el sitio web Aviation A2Z, todas las operaciones con la menguante flota de Airbus A319 de la aerolínea finalizarán el 8 de enero de 2025, y no se programarán vuelos en la red de la aerolínea después de esa fecha.

Últimos vuelos

Los datos de Cirium indican que los últimos vuelos del A319 que operará la aerolínea serán desde el Aeropuerto de Fort Lauderdale (FLL), el principal centro de operaciones de la compañía, a Newark (EWR), Boston (BOS), Houston (IAH) y San Juan (SJU) en Puerto Rico.

El último vuelo está previsto para esa fecha, el NK262 desde San Juan a Fort Lauderdale, que llegará al aeropuerto de Florida a las 22:05 hora local.

La medida contradice el plan de flota futura de Spirit , cuyos detalles se hicieron públicos en agosto de 2024. El plan mostraba que la aerolínea continuaría operando el A319 hasta 2025 con un plan de retiro vigente que se extendería hasta el segundo trimestre de 2025.

Sin embargo, como no hay vuelos planificados para operar después del 8 de enero de 2025, parece que la aerolínea ha dado marcha atrás en este plan y ahora está acelerando el proceso de retiro.

La hora de los A320

Según los informes, un servicio que durante mucho tiempo se había operado con el A319 ya ha pasado a ser operado por el A320 de mayor tamaño de la flota de Spirit. S trata de la ruta de Fort Lauderdale a Newark de la aerolínea.

Los datos de ch-aviation muestran que la aerolínea solo tiene siete A319 de 145 asientos en su flota, aunque cuatro figuran como inactivos y los tres restantes siguen volando. También opera 64 A320, 91 A320neo, 30 A321 y 25 A321neo.

La aerolínea se ha visto gravemente afectada por el problema de Pratt & Whitney que ha afectado a los aviones A320neo en todo el mundo, con 24 aviones que figuran actualmente como en tierra.

Una medida común

La decisión de eliminar el A319 de su flota no es algo poco común entre las aerolíneas de bajo coste en el pasado. EasyJet, que en su día fue un gran operador del A319, ha reducido su flota de A319 de más de 170 ejemplares de este tipo a tan solo 82 aviones actuales en los últimos años.

Los analistas creen que el motivo de esta decisión es que el potencial de ingresos que supone operar el A320, de mayor tamaño, en lugar del A319 en la misma ruta supera el ahorro de costes que supone operar el avión más pequeño, que es mínimo.

Las mismas razones económicas hicieron que el A318, que no goza de tanta popularidad, fuera reemplazado por un avión de mayor tamaño, el A320, en las mismas rutas, una medida que otro operador de bajo coste con sede en Estados Unidos, Frontier, adoptó hace algunos años para frenar las crecientes pérdidas.

Además, se cree que la capacidad de alcance ligeramente mayor del A319 con respecto al A320 no es un activo útil para Spirit, que tiene una red bien servida por los A320 y A321 que opera actualmente.

Posible quiebra

A principios de octubre de 2024, AeroTime reveló que Spirit Airlines había iniciado conversaciones iniciales con sus tenedores de bonos sobre los términos de una posible declaración de quiebra en el futuro.

La compañía se enfrenta a una carga de deuda de 3.300 millones de dólares, con más de 1.100 millones de dólares en bonos garantizados que vencen en el plazo de un año. La aerolínea necesita refinanciar o ampliar estos pagarés antes del 21 de octubre para cumplir con la fecha límite de su procesador de tarjetas de crédito.

Como resultado, la aerolínea se ha visto obligada a reestructurar sus operaciones, su flota de aviones y su red en medio de problemas financieros persistentes, que se han visto exacerbados por la decisión del Departamento de Transporte de Estados Unidos de rechazar su propuesta de fusión con JetBlue, con sede en Nueva York, a principios de 2024.

Acuerdo con los bonistas

Cualquier solicitud de este tipo dependería de que la medida cuente con el apoyo suficiente y de que se haya alcanzado un acuerdo formal con los bonistas y los acreedores para respaldarla.

Además, la aerolínea está estudiando la reestructuración de su balance mediante una transacción extrajudicial, según un informe publicado por el Wall Street Journal el jueves 3 de octubre de 2024, aunque no se han hecho públicos detalles específicos al respecto.

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