Las aerolíneas se preparan para un 2025 con ganancias en crecimiento, continuando así el impresionante ciclo iniciado tras la pandemia, periodo en el que se alcanzaron pérdidas récord de 137 mil millones de dólares en 2020, demostrando una vez más su resiliencia ante los desafíos de un entorno que sigue siendo complejo en términos ambientales y políticos.
Según los datos revelados este martes durante el IATA Global Media Day, encuentro anual con la prensa, en 2025 las aerolíneas alcanzarían beneficios por 36,6 mil millones de dólares, con un margen del 3,6%. Esto supera los 31,5 mil millones de dólares proyectados para 2024, que representan un margen del 3,3%. Los beneficios por pasajero se estiman en 7 dólares, 60 centavos más que en 2024, aunque casi un dólar menos que el pico de 2023. Marie Owens Thomsen, vicepresidenta sénior de Sostenibilidad y economista en jefe de IATA, contextualizó este dato al señalar que con esa cifra no se puede comprar ni un café en algunas de las principales ciudades del mundo.
El beneficio operativo de las aerolíneas en 2025 se pronostica en 67,5 mil millones de dólares, con un margen operativo del 6,7%, tres décimas más que en 2024.
Por primera vez en la historia, en 2025 la industria aerocomercial superará la marca del billón de dólares en ingresos, alcanzando 1.007 billones, un 4% más que en 2024. Los gastos crecerían un 4%, situándose en 940 mil millones de dólares.
En cuanto al tráfico de pasajeros, se proyecta un crecimiento del 6,7% respecto a 2024, con 5,2 mil millones de personas viajando en avión durante 2025, rompiendo por primera vez la marca de 5 mil millones. Por su parte, la carga crecería un 5,8%, alcanzando 72,5 millones de toneladas.
La performance financiera general de la aviación comercial estará respaldada por costos más bajos de combustible, cuya brecha con el precio del petróleo Brent se ha reducido a solo 15 dólares, tras picos de más de 60 dólares en 2022. Sin embargo, IATA advierte que la situación podría mejorar si los fabricantes resuelven los problemas en las cadenas de producción.
Willie Walsh, director general de IATA, fue contundente al respecto, afirmando que la industria está lidiando con un monopolio de fabricantes que se están aprovechando de la situación, beneficiándose incluso de los problemas que ellos mismos provocan. Señaló cómo el precio de algunos repuestos ha superado ampliamente la inflación. «No hay evidencia de que estos problemas se estén resolviendo, y ya hemos aguantado suficiente», enfatizó Walsh. «Tenemos que aumentar la presión y buscar apoyo para hacer cumplir los compromisos», agregó, explicando que simplemente transmite lo que le comunican las aerolíneas. «Si estuviera al frente de una aerolínea, mi paciencia se habría agotado hace tiempo», concluyó.
Una ramificación de este problema es que la flota mundial alcanzó una antigüedad de 14,8 años, el número más alto de la serie midiendo desde 1990. En estos 34 años, el promedio es de 13,6 años. Esto afecta la eficiencia de las aerolíneas y también la búsqueda de mejoras en el impacto ambiental.
En este panorama, las aerolíneas de Latinoamérica y el Caribe cerrarán 2024 con beneficios por mil millones de dólares, con un margen del 2,1%. Para 2025, se pronostica un crecimiento de beneficios a 1,3 mil millones de dólares, con un margen del 2,4%, lo que equivale a un beneficio por pasajero de 3,8 dólares (vs. 3,2 dólares en 2024). La demanda (en RPK) crecería un 8% en 2025, mientras que la capacidad (en ASK) aumentaría un 7,9%.
Según el reporte de IATA, la región alberga «aerolíneas que prosperan y otras que enfrentan dificultades financieras significativas, incluyendo procedimientos bajo el Capítulo 11». Además, señalan que las devaluaciones en países con operaciones domésticas importantes han generado desafíos, ya que muchos costos clave, como flotas y servicios de deuda, se pagan en dólares.
Otro desafío importante, mencionado específicamente por Marie Owens Thomsen durante la ronda de preguntas, es que algunos gobiernos en mercados menos maduros, como los de Latinoamérica y el Caribe, tienden a ver a la aviación comercial como una «cash cow», aumentando tasas e impuestos. «Es impresionante lo que las aerolíneas latinoamericanas han logrado. Hay muchas razones para creer que los factores de ocupación y ganancias seguirán creciendo», comentó.
Willie Walsh añadió que «considerando la geografía de Latinoamérica, es obvio que el transporte aéreo es esencial, y mucho del crecimiento global también provendrá de esta región. Hay grandes oportunidades, y las aerolíneas han hecho un buen trabajo en aspectos como la modernización de flotas y consolidaciones».
NOTICIA EN DESARROLLO