Una nueva advertencia se ha lanzado en la industria de la aviación, esta vez sobre los aranceles que Donald Trump implementó esta semana a las importaciones de acero, lo que podría llevar a un encarecimiento de 40 millones de dólares el precio de un Boeing 787.

La preocupación fue destacada en una entrevista concedida a Aengus Kelly, CEO de AerCap, la mayor compañía de leasing de aeronaves del mundo, con una cartera de 1.700 aviones, 1.000 motores y 300 helicópteros arrendados a varias aerolíneas, incluso en Brasil.

En entrevista con la cadena estadounidense CNBC, el ejecutivo afirmó: “Si tenemos el peor escenario, con un aumento generalizado del 25% en las tarifas y represalias de ambos lados, el precio de un Boeing 787 subiría en US$40 millones. Nadie pagará por eso. Eso no va a pasar. No podrán comprarlo, punto”, según informó nuestro medio asociado Aeroin.

Kelly advirtió que las aerolíneas no estarán dispuestas a trasladar este costo a los consumidores, ya que un aumento cercano al 25% sería inviable, sobre todo dada la existencia de aviones competidores en el mercado.

“Lo que ocurrirá es que las aerolíneas que no puedan pagar el avión llamarán a Airbus. “Entonces, en el peor de los casos, con el tiempo, Boeing terminaría con alrededor del 20% al 25% del mercado global, concentrado en Estados Unidos, mientras que Airbus terminaría con el resto del mundo, con alrededor del 75% al ​​80% del mercado global, porque nadie podría pagar esos precios”, concluyó el CEO.

En enero, pocos días antes de la investidura de Donald Trump, Kelly ya había advertido sobre este impuesto. Todavía cree que la medida se revertirá o se reducirá, pero destaca que, de todas formas, el aumento de costos podría favorecer a Airbus y Embraer en el mediano plazo.