En un nuevo intento por acallar las críticas que han recibido por la nueva y sorpresiva ola de duras restricciones al movimiento aéreo internacional que han implementado esta semana (poniendo un tope de 600 pasajeros diarios), el gobierno argentino, a través de la Dirección Nacional de Migraciones, reveló datos estadísticos respecto a las personas que viajaron al exterior durante el último mes recolectados en base a las declaraciones juradas que éstas deben hacer a la hora de dejar el país.
Los mismos indican que de las 44.242 personas que viajaron entre el 28 de mayo y el 28 de junio último, el 60% lo hizo aduciendo razones de turismo, el 15% por cuestiones laborales, el 14% por residencia, el 6% por mudanza, el 3% por estudio y el 2% por otras razones.
Florencia Carignano, titular de Migraciones, fue más allá y negó el uso del término varados. «No hay varados. En realidad se trata de 45 mil argentinos que declararon salir por turismo en los últimos 4 meses» (sic).
«El hecho de encontrarse afuera del país no significa estar varado. Hay un porcentaje de ellos que deberán reprogramar su vuelta a partir de las nuevas disposiciones de ingreso y que podrían implicar según el caso alguna demora, pero no es una situación para nada equiparable a estar varado», concluyó la funcionaria.
Desde el gobierno buscan además instalar con aún más fuerza el concepto de que quienes viajaron, y más aún por turismo, lo hicieron conscientes de que la situación de las fronteras podía cambiar de manera repentina al estar presente en la declaración jurada esa advertencia, lo cual es cierto, pero la realidad también indica que, mientras el mundo cada vez abre más sus frontera aéreas, pocos imaginaban que Argentina tendría semejante retroceso.
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