Southwest Airlines ha anunciado el cierre de dos bases satélites de auxiliares de vuelo, una en Austin y otra en Fort Lauderdale, Florida, como parte de sus esfuerzos para aumentar la eficiencia y reducir costos operativos. 

Este cambio afectará a 280 asistentes de vuelo, quienes serán reubicados en una de las otras 12 bases de tripulación que la aerolínea opera en diferentes ubicaciones, según una publicación de Bloomberg Law.

El cierre de estas bases está programado para el 1 de julio, según un comunicado enviado por correo electrónico por la compañía. Este movimiento se produce después de que Southwest Airlines anunciara los primeros despidos involuntarios en sus 53 años de historia, lo que refleja los desafíos financieros y operativos que la aerolínea está enfrentando en un entorno competitivo y en constante cambio.

La reubicación de los empleados afectados busca minimizar el impacto laboral, aunque implica cambios significativos para los trabajadores, quienes tendrán que adaptarse a nuevas bases de operación. Southwest ha enfatizado que estas medidas son necesarias para mantener la competitividad y la sostenibilidad de la aerolínea a largo plazo.