El Gobierno de Estados Unidos autorizó al aeropuerto internacional de Orlando a efectuar vuelos a Cuba, y se convierte así en el séptimo aeródromo de Florida que puede transportar pasajeros a la isla caribeña.
«El aeropuerto internacional de Orlando ahora puede suministrar a los cubanos residentes en el centro de Florida un acceso más conveniente a Cuba», dijo el director ejecutivo de la Autoridad de Aviación del Gran Orlando, Phil Brown.
En un comunicado, detalló que la notificación de la oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, por su sigla en inglés) de Estados Unidos fue recibida el miércoles.
Orlando se suma así a Tampa, Fort Lauderdale, Cayo Hueso, Palm Beach y Fort Myers, todas localidades de Florida que ya tienen permiso para operar vuelos a Cuba.
Florida es el hogar de 1,2 millones de cubanos, el grupo hispano con mayor población en el estado, y se concentran principalmente en el condado de Miami-Dade, al sur, y en Tampa, en la costa oeste, de acuerdo con datos del censo del 2010.
El aeropuerto de Miami era el único que prestaba el servicio en Florida antes de que en enero de 2011 el presidente estadounidense, Barack Obama, aprobara medidas para apoyar al pueblo cubano «a determinar libremente el destino de su país».
Entre esas medidas se incluye el permiso para que todos los aeropuertos internacionales del país que reúnan los requisitos puedan ofrecer viajes fletados y autorizados a la isla.
Las autoridades se comprometieron a dar ese permiso «siempre que dichos aeropuertos tengan servicios adecuados de aduanas e inmigración, y que un proveedor autorizado de servicios de viaje haya expresado interés en prestar servicios entre Cuba y dicho aeropuerto», según informó entonces la Casa Blanca.
Antes del anuncio de Obama, sólo tres aeropuertos a nivel nacional transportaban pasajeros a Cuba: Los Ángeles, Miami y Nueva York.
Las personas que pueden viajar a la isla caribeña son los estadounidenses de origen cubano, las organizaciones religiosas y las instituciones educativas superiores que pueden patrocinar viajes por motivos académicos.
Asimismo, se permite a instituciones académicas con una licencia específica, expedida por la Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, patrocinar seminarios o talleres académicos relacionados con Cuba y se autoriza la asistencia de profesores y estudiantes.
También se otorgan «licencias específicas para una mayor variedad de actividades periodísticas».
Fuente: EFE