Uno no cree en los números, pero están. Digo, medir el éxito o fracaso de algo a partir de un número es un parámetro válido, pero a veces deja un montón de cosas afuera. Aún cuando creo fervientemente que este espacio pasa por otro lado, hablemos un poquito de números.
En este febrero que termina, de acuerdo a lo que puedo analizar y estimar para el día de hoy, este blog habrá alcanzado cifras absolutamente inesperadas. No voy a entrar en detalle del número fino, pero podemos sacar tres conclusiones, que comparto con ustedes.
– En febrero solo, la cantidad de visitas equivalió a cuatro meses promedio del año pasado.
– El promedio de páginas vistas por visitante subió significativamente.
– Combinados enero y febrero, la cantidad de visitantes y páginas vistas es la mitad de las alcanzadas en todo 2017.
Lo primero que me sale decir, es wow. Inesperado, diría que inmerecido, pero acá está.
Lo segundo, lo voy a repetir más abajo, es gracias.
Lo tercero, es que asumo esta responsabilidad con orgullo y con cierto pavor, porqué no decirlo. Hace casi un año, esto era un escape de ocio. Hace seis meses, un proyecto. Hoy es una realidad que puede -quiero con el alma que así sea- convertirse en una carrera.
Seguirán viniendo más cambios, tal vez sea momento de salir a buscar -y con suerte, alcanzar- algunos acuerdos. Lo que sí les aseguro es que la integridad de este espacio seguirá intacta. Criticando a quien haya que criticar, destacando las cosas que se hacen bien, no importa quién las haga. La mejor forma de honrar el impacto que este sitio está teniendo es continuar por el mismo camino: el de la credibilidad, a costa de todo. No me importa perder un canje si afecta de algún modo mi capacidad para decir lo que quiero decir. Llegué hasta acá con esa premisa grabada como un mantra. Seguirá igual.
Como dije antes, sólo me queda agradecerles. A ustedes que leen, a los amigos que voy generando. A los equipos de prensa de las compañías, a los colegas que voy conociendo y van confirmando mi respeto. A los otros, bueno, besito. A la gente de la industria que me manda info, que charla conmigo de cosas y me hace mejor. Porque el peor error al que este crecimiento puede exponerme, es a la idea de que uno sabe todo. Que es el más experto.
Y si bien es innegable que tener este impacto es una caricia al ego, constantemente me recuerdo que lo importante es tener en cuenta que lo que uno sabe siempre es poco. Y uno aprende desde ese lugar. Sé algo porque en realidad no sé un carajo. Y averiguo. Busco. Leo y releo. Analizo y a partir de ahí, digo. Para mí, hacer periodismo es eso. Partir de la pregunta, no desde la respuesta.
Les confieso: en mi casa, en la habitación que hace de escritorio, arriba de la mesa de trabajo tengo una frase. De tres palabras, corta y al pie. La segunda es un apellido hecho verbo. Y ese apellido ha cambiado un par de veces. El concepto ha sido siempre el mismo, y seguirá igual. Desde hace un tiempito, ahí arriba dice «No Rinzelearla. Nunca.»
Sólo puedo prometerles más de lo mismo: analizar la industria para que podamos entender más y que no nos vengan a tratar de manipular desde la ignorancia, o apelar al pánico de Doña Rosa. En un mundo ideal, no existirían Doñas Rosas. No sé si mi espacio, este pequeño tanquecito a GNC podrá contra todas ellas. Pero lo vamos a intentar, con todas las herramientas disponibles. Y con todos ustedes respaldando ese combate.
Gracias de nuevo. Nos seguimos leyendo. Abrazo para todos.
A mi gusto hubiera quedado más adecuado «No Dominelliarla. Nunca», pero son tan similares que la diferencia es muy sutil. BTW felicitaciones por el crecimiento totalmente merecido de este espacio, y también por el profesionalismo de tus notas.
Saludos!
Gracias por leer! Y… el apellido cambia, pero el mantra es el mismo!
Que bueno tener todos a diario un poco de diazpez.com para aprender, reirnos y poder compartir virtualmente esta pasion que es la aviación.
Gracias a vos por seguir poniendo contenido todos los dias!
Gracias estimado! Gracias por leer.
Capaz no entro por un par de días a este blog y de repente «Diaz Pez, nuevo CEO del grupo Aerolíneas» jaja. Felicitaciones por todo el trabajo realizado! Merecido reconocimiento
Gracias estimado! Abrazo!
A usted!!!
no, graciavó.
Te olvidaste de agradecerle a la tia del casamiento!!!!
La tía Lily! Siempre presente.
Para Carlitos con amor! jaja, felicitaciones por el blog, debo ser de los nuevos lectores de hace un mes aprox! saludos!
Gracias por leer! Espero que te guste lo que va a apareciendo.
¡Mis más sinceras felicitaciones estimado!
Así como el mercado aerocomercial argentino se está abriendo cada vez más a la competencia, es un gusto que lo mismo también vaya sucediendo entre aquellos que tenemos la pasión, no sólo por la aviación en sí, sino también por contarla y divulgarla sin mayores intereses.
Usted es competencia que inspira a mejorar; y la misma siempre es bienvenida, más cuando encima hay buena gente del otro lado.
Abrazo y espero que nos encontremos en FIDAE para hacer tremendo despelote!
Pienso lo mismo de usted, estimadísimo. La verdad que este camino emprendido me permitió conocerlo y admirarlo. Usted es competencia sana y que eleva el nivel. Sé que el futuro nos depara muchas cosas buenas.
Abrazo grande, grande.