Durante la primera sesión del IATA Global Media Day que está teniendo lugar en Ginebra, Suiza, el vicepresidente de la asociación para las Américas, Peter Cerdá, llevó adelante un repaso del estado de situación de la industria en la región latinoamericana y los obstáculos que enfrenta.
En primer lugar, Cerdá informó algunos números de la región, detallando que el transporte aéreo genera USD 156 mil millones al producto bruto de Latinoamérica y el Caribe, apoyando así a 7,2 millones de puestos de trabajo.
“Hemos visto en la última década un incremento significativo de la conectividad en la región”, dice Peter Cerdá. #IATAMediaDay pic.twitter.com/NAsN3nBNhZ
— Aviacionline.com (@aviacionline) December 12, 2018
“Hemos visto en la última década un incremento significativo de la conectividad en la región”, destacó el ejecutivo. Actualmente Latinoamérica está conectada con 160 ciudades globales a través de 2,6 millones de vuelos al año.
El pronóstico económico continúa siendo positivo, y se espera que para el año 2034 el tráfico de pasajeros se duplique, aportando unos USD 322 mil millones al PBI.
Argentina debería sumar unos 23 millones de pasajeros más para ese año (de los cerca de 19 millones con los que cerraremos en 2018), mientras que Brasil tendrá 94 millones más, México 85 millones, Colombia 39 millones y Perú 23 millones.
«La región es el hogar de aerolíneas muy exitosas», dijo Cerdá, poniendo a Copa, LATAM y Avianca como ejemplo en la construcción de marcas transnacionales que han sabido adaptarse a las necesidades de los pasajeros.
«Los pasajeros de la región han aprovechado un descenso del 64% en el precios de los pasajes desde 1990»
Pero como no todo es color de rosa, Cerdá volvió a comentar acerca de los obstáculos que enfrentamos en esta zona del mundo: Infraestructura, Competitividad y Armonización Regulatoria.
Infraestructura
“Somos una región que tiende a ser más reactiva que proactiva”, comentó Peter Cerdá. «En los proyectos aeronáuticos se necesita planeamiento, previsión y visión», agregó.
Entre los principales temas se encuentran el impacto de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (lo cual tendría un costo de USD 5 mil millones), la suma de capacidad y mejora de procesos en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, la fuerte necesidad de inversiones en aeropuertos argentinos, las mejoras necesarias en el espacio aéreo de Panamá para poder atender los movimientos de la nueva terminal, y la construcción de la nueva terminal y la segunda pista de Lima.
En relación a nuestro país, Peter Cerdá fue lapidario al afirmar que el desafío más grande de Argentina no está en tierra sino en el aire, especialmente en el área Baires. “Es uno de los espacios aéreos más viejos e ineficientes de la región”, comentó. Aunque sí reconoció que el gobierno de Mauricio Macri ha llevado adelante importantes mejoras en el entorno aerocomercial que han posibilitado un crecimiento del transporte aéreo, destacando entre ellas la liberalización del piso tarifario e inversión en obras aeroportuarias. Aunque volvió a insistir con que “podemos tener una gran infraestructura en tierra, pero si no está alineada en el aire se presentarán ineficiencias”.
Competitividad
En términos de competitividad, para IATA Latinoamérica y el Caribe continúa siendo un lugar muy caro para la industria, dado que diferentes estructuras impositivas consideran a la aviación comercial como un generador de dinero fácil para los gobiernos, especialmente en el Caribe, en donde las tasas e impuestos representan más del 30% del precio total que pagan los pasajeros para vuelos dentro de la región. A modo de ejemplo, en Barbados se estableció un impuesto para turistas que hace que una familia de cuatro personas de Estados Unidos o Europa deba pagar unos USD 280 adicionales.
Cerdá reconoció avances en este tema en Chile, donde el gobierno ha tomado la decisión de reducir las tasas domésticas en un 10% en 2019, y otro 10% en 2020, mientas que las tasas internacionales bajarán de USD 30 a USD 26.
Se le dedicó un párrafo aparte a la Argentina, reconociendo positivamente a la «revolución de los aviones» por haber permitido la apertura de nuevas rutas, desregulado las tarifas y favorecido la llegada de nuevos competidores, aunque no dejaron de mencionar que todavía debe recorrerse el camino de reducir los costos para potenciar la competitividad.
Armonización regulatoria
Este es un tema que ha causado mucho ruido últimamente en nuestro país, sea por la aplicación de las normas LAR (Regulaciones Aeronáuticas Latinoamericanas) o por la reciente flexibilización del proceso de ingreso de pilotos extranjeros a empresas argentinas, la causa del paro anunciado para este jueves y viernes.
En nuestra región las aerolíneas han creado modelos de negocios multinacionales, pero se encuentran con regulaciones que se manejan país por país, por lo que desde IATA se solicita que exista un reconocimiento mutuo, estándares comunes en entrenamiento, licencias y registro de aeronaves.
Como ejemplos positivos en la región se cita a Brasil, país en donde se ha liberalizado la regulación para el intercambio de aeronaves, lo que facilita que los grupos aéreos puedan movilizar su flota entre países.
En Centroamérica, los países integrantes del Cocesna (Costa Rica, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras y Belice) ya han aprobado legislación que estandariza los requerimientos de todas las licencias aeronáuticas, haciendo posible que la licencia de un estado sea válida en todos los demás.
Otro tema relacionado con la competitividad que preocupa a IATA se relaciona con el aspecto comercial de las aerolíneas.
«Desafortunadamente en Latinoamérica, los legisladores y agencias regulatorias están intentando volver hacia atrás el reloj a una era regulada, introduciendo restricciones en nombre de los derechos del pasajero», mencionó Peter Cerdá.
Esto deja a la región un paso atrás del resto del mundo en este aspecto, atentando contra la competitividad de las aerolíneas.
En Perú, por ejemplo, bajo algunas circunstancias un pasajero doméstico puede endorsar su ticket a otra persona; por otro lado, en Colombia las aerolíneas deben ofrecer reembolsos completos en pasajes con tarifas no promocionales si el pasajero cancela el viaje hasta 24 horas antes.
«Estos ejemplos elevan el costo de los pasajes para todos al limitar la capacidad de las aerolíneas de diferenciarse ofreciendo servicios particulares a cada cliente. Los pasajeros deberían tener la libertad de elegir la aerolínea que más se ajuste al nivel de tarifa y servicio que desea», dijo Cerdá.
«Latinoamérica tiene todos los elementos necesarios para convertirse en una historia de éxito en la aviación comercial: aerolíneas competitivas y eficientes, una clase media en crecimiento, una demografía favorable y una geografía que favorece el transporte aéreo, sin embargo, con la excepción de unos pocos países, los gobiernos de la región no tratan a las aerolíneas como socias que ayudan al desarrollo económico y social», agregó.
Pueden seguir la cobertura en vivo del IATA Global Media Day 2018 a través de la cuenta de Twitter de Aviacionline.com.
Felicitaciones por el viaje y agradecido por el informe.