AirAsia Group quiere recaudar hasta 602 millones de dólares para fin de año, mientras revisa su negocio en Japón intentando sortear la crisis del COVID-19 informó su director ejecutivo.
De acuerdo a lo reportado por Reuters, Tony Fernandes indicó en una entrevista que el grupo podría hacerse de cientos de millones de dólares por préstamos bancarios y otros inversores. Dichos inversionistas incluyen actores de capital privado, socios estratégicos y conglomerados. También declaró que el grupo estaba evaluando sus operaciones en Japón, la más pequeña de sus filiales extranjeras, aunque su empresa conjunta con Tata Sons en India se mantendría sin modificaciones.
“Si la situación de liquidez fuese abundante, no deberíamos pensar en Japón, pero hoy es un debate que debe darse” dijo, sin dar más detalles. El grupo tiene la intención de consolidar y fortalecer su presencia en la región, “y si eso significa salir algún día de India y Japón, que así sea”. El Centro de Aviación CAPA dijo en un informe el Viernes pasado que es probable que los negocios de Malasia y Tailandia de la aerolínea sobrevivan a la pandemia “relativamente ilesos”, pero no sería el caso de las franquicias en Indonesia, Filipinas, India y Japón.
En cuanto a los pedidos de aviones de largo alcance para AirAsia X, Fernandes dijo que el grupo estaba conversando con Airbus para reestructurar su cartera de pedidos. “Somos clientes de Airbus desde hace mucho tiempo, lo que garantiza encontrar una salida en la que todos ganemos”.