El gobierno australiano anunció hoy lunes que seguirá incluyendo por cuatro meses más en su presupuesto anual, un paquete de ayuda por las pérdidas económicas producidas por COVID-19 para las aerolíneas nacionales, después de la predicción económica de que el país registraría un déficit de 198.500 millones de dólares australianos (140.000 millones de dólares estadounidenses) según la información publicada por Reuters.
El gobierno federal continuará brindando ayuda económica a vuelos domésticos hasta el 31 de enero de 2021 y a vuelos regionales hasta el 28 de marzo del mismo año, dijo el viceprimer ministro Michael McCormack en un comunicado. El gobierno inicialmente había puesto al 30 de septiembre como fecha de finalización de la ayuda económica.
La extensión refleja la incertidumbre sobre cuánto tiempo afectará la pandemia a la industria de la aviación australiana, quien vio desaparecer la mayor parte de sus ingresos por el cierre de las fronteras internas y también con los países del mundo.
«La interrupción causada por los acuerdos fronterizos actuales ha dificultado la vida en la industria de la aviación, con vuelos cancelados, reembolsos y frustración de los pasajeros», dijo McCormack en un comunicado.
“La incertidumbre afecta la capacidad de las aerolíneas y los aeropuertos para planificar la recuperación y debilita la confianza del consumidor, lo que representa un costo significativo para la industria y, en última instancia, para la economía australiana”.
McCormack no determió un monto económico para la extensión del paquete de apoyo, pero dijo que el gobierno ya había gastado más de 150 millones de dólares australianos (alrededor de 106 millones de dólares estadounidenses) en él desde que lo implementó en abril.
La asesoría económica Deloitte Access Economics, dijo que esperaba que Australia registrara un déficit presupuestario 14 mil millones de dólares australianos mayor que el pronóstico que el gobierno había dado en julio antes de que su segunda ciudad más grande, Melbourne, volviera al bloqueo para detener una segunda ola de infecciones de virus.
El gobierno de Australia pospuso su anuncio de presupuesto anual del calendario habitual en mayo, diciendo que la interrupción causada por el virus había hecho imposible dar pronósticos económicos.