Las compañías rusas se preparan para desplegarse por Sudamérica y el Caribe: en este caso una de ellas le han aprobado el derecho de operar entre Rusia y Brasil.
Rosaviatsiya ha concedido los permisos, a través de la orden N°. 501-P «SOBRE LA ADMISIÓN Y REVOCACIÓN DE LA ADMISIÓN DE TRANSPORTISTAS CON LAS LICENCIAS CORRESPONDIENTES PARA REALIZAR EL TRANSPORTE AÉREO INTERNACIONAL DE PASAJEROS Y (O) CARGA», a Azur Air para iniciar las siguientes rutas:
- Ekaterinburgo/Kotsovo (SVX) – Río de Janeiro con un vuelo semanal.
- Kazán (KZN – Río de Janeiro con un vuelo semanal.
- Moscú (VKO) – Río de Janeiro con dos vuelos semanales.
- San Petersburgo (LED) – Río de Janeiro con un vuelo semanal.
El mercado internacional ruso ha caído como consecuencia de las restricciones sanitarias de sus destinos habituales al Sudeste Asiático.
Las aerolíneas dedicadas al servicio de destinos turísticos y de ocio fueron las más perjudicadas, teniendo en cuenta que este nicho es el principal movimiento internacional del gigante euroasiático.
Por esta situación, las compañías rusas buscan nuevos rumbos para encontrar su subsistencia. Evidentemente han escogido a América Latina y Caribe, en donde las restricciones sanitarias son menores. Gran parte de las rutas solicitadas en dicha región son de playa y altamente turísticas.
Recientemente han solicitado más vuelos a México, República Dominicana y Cuba y como así también desembarcar en Venezuela.
Actualmente no hay vuelos regulares entre el gigante sudamericano y Rusia pese a que en el 2019 se registró el ingreso de 24.931 turistas rusos en Brasil, según su Ministerio de Turismo.
La última aerolínea que operó un enlace entre ambos países fue Transaero, cuando desembarcó en 2011 en Río de Janeiro.
