El sistema de propulsión desarrollado por el consorcio ACHIEVE, en colaboración con Safran, permitirá un rodaje ecológico, contribuyendo a reducir la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación sonora.
El proyecto ACHIEVE está integrado, además, por la Universidad de Nottingham; la National Electrical Manufacturers Association (NEMA), que se especializa en el diseño, fabricación y prueba de motores y generadores eléctricos; y Power System Technology (PST), que diseña y fabrica convertidores de potencia para la industria aeroespacial.
Según un comunicado emitido por la iniciativa europea Clean Aviation “dado que los aeropuertos son áreas muy contaminadas, la capacidad de rodadura ecológica mejorará significativamente la calidad del aire alrededor de ellos. Además, con el motor apagado, el ruido de un avión también se reducirá drásticamente”.
“El dispositivo mecatrónico, que se integrará en la caja de engranajes de un motor de avión, permite el rodaje ecológico de futuros turbohélices cuando funcionan como un motor. El mismo dispositivo se utiliza como sistema generador cuando la aeronave está en el aire y suministra energía eléctrica a la carga a bordo. Ha sido probado con éxito en las instalaciones de prueba de la Universidad de Nottingham (UNOTT) con máxima potencia (100%) y máxima velocidad (100%). La densidad de potencia de la máquina eléctrica y la electrónica de potencia dentro del sistema ACHIEVE es de 7,2 kW/kg y 9,2 kW/kg respectivamente”, agrega el comunicado.
Los avances de ACHIEVE fueron testeados con éxito en Nottingham, tras ser integrado al Tech TP, el demostrador en tierra del motor turbohélice Clean Sky 2 de Safran. Estos nuevos motores turboprop podrían ser una interesante alternativa para aviones regionales y los futuros desarrollos de aeronaves comerciales de mayor envergadura.