El presidente Jair Bolsonaro sancionó sin vetos la Ley 14.355/22, que prevé la reducción del Impuesto a la Renta Retenida en la Fuente (IRRF) para los pagos realizados en el extranjero por las aerolíneas de transporte regular (de pasajeros o cargas) en operaciones de leasing de aeronaves y motores. El texto se publicó el martes (31) en una edición extra del Boletín Oficial, según reporta nuestro medio asociado en Brasil, Aeroin.
Por la ley sancionada, la reducción del IRRF en las operaciones de arrendamiento de aeronaves será válida hasta el final de 2026. En 2022, la alícuota bajará del 15% actual a cero, manteniéndose así en 2023. Después, será el 1% en 2024; el 2% en 2025; y el 3% en 2026.
La norma proviene de la Medida Provisional 1094/21, emitida en diciembre pasado por el Ejecutivo y aprobada en mayo por el Congreso Nacional, con modificaciones.
El leasing aeronáutico funciona como un arrendamiento realizado por bancos, financieras y empresas a las compañías aéreas, que pagan una cantidad mensual y se encargan de la explotación y el mantenimiento.
La mayoría de las compañías aéreas prefieren estos contratos a la compra de aviones, ya que una de las ventajas es el menor coste.
Con la nueva ley, el gobierno brasileño espera reducir los costes de los viajes y fomentar el turismo. La exención de impuestos se estimó en más de R$ 1,66 mil millones (~USD 330 millones) para el período entre 2022 y 2026. Esta cantidad debería compensarse este año y el próximo con el aumento de los ingresos procedentes de otros impuestos federales.
Según datos obtenidos por Aviacionline a través de la base de ch-aviation, la flota activa de las aerolíneas brasileñas que operan vuelos regulares de pasajeros o cargas se compone al día de hoy de 406 aeronaves, de las cuales 333 están bajo algún formato de leasing.